†
JMJ
Pax
† Lectura del santo Evangelio según san            Lucas 9, 51-56
Gloria a ti, Señor.
Cuando ya se acercaba el tiempo en que tenía          que salir de este mundo,          Jesús tomó la firme determinación de emprender el viaje a          Jerusalén. Envió          mensajeros por delante y ellos fueron a una aldea de Samaria          para conseguirle          alojamiento; pero los samaritanos no quisieron recibirlo, porque          supieron que          iba a Jerusalén. Ante esta negativa, sus discípulos Santiago y          Juan le preguntaron:
          "Señor, ¿quieres que hagamos bajar fuego del cielo para que          acabe con          ellos?"
          Pero Jesús se volvió hacia ellos y los reprendió. Después se          fueron a otra          aldea.
          Palabra del Señor.
          Gloria a ti, Señor Jesús.
Suplicamos su            oración: Esto es          gratis pero cuesta. No sería posible sin sus oraciones: al menos          un Avemaría de          corazón por cada email que lea. Dios te salve María, llena eres          de Gracia, el          Señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y          bendito es el fruto          de tu vientre, Jesús; Santa María, Madre de Dios, ruega por          nosotros pecadores,          ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. ¡Recuérdenos en sus          intenciones y          misas! 
Aclaración: una          relación muere sin comunicación y          comunidad-comunión. Con Dios es          igual: las "palabras          de vida eterna" (Jn 6,68; Hc 7,37) son          fuente de vida espiritual          (Jn 6, 63), pero no basta charlar por teléfono (oración), es          necesario visitarse,          y la Misa permite ver a Jesús, que está tan presente en          la Eucaristía,          que Hostias han sangrado: www.therealpresence.org/eucharst/mir/span_mir.htm
Por leer          la Palabra, no se debe dejar de ir a Misa, donde ofrecemos TODO          (Dios) a          Dios: al actualizarse el sacrificio de la Cruz, a) co-reparamos          el daño que          hacen nuestros pecados al Cuerpo de Cristo que incluye los          Corazones de Jesús y          de María, a Su Iglesia y nosotros mismos, b) adoramos, c)          agradecemos y d)          pedimos y obtenemos Gracias por nuestras necesidades y para la          salvación del          mundo entero… ¿Que pasa en CADA Misa? 5 minutos: http://www.youtube.com/watch?v=v82JVdXAUUs
Lo que no          ven tus ojos (2 minutos): http://www.gloria.tv/?media=200354
Película          completa (1 hora): http://www.gloria.tv/?media=417295
Explicación:          http://www.youtube.com/watch?v=eFObozxcTUg#!
Si Jesús se            apareciera, ¿no correríamos a verlo, tocarlo, adorarlo? Jesús            está aquí y lo            ignoramos. Jesús nos espera (Mc 14,22-24) en la Eucaristía: "si no coméis la carne del              Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en              vosotros" (Jn 6,53; 1 Jn            5,12). Si comulgamos            en estado de Gracia y con amor, nos hacemos uno (común-unión)            con el Amor y            renovamos la Nueva Alianza de Amor. Si faltamos a las bodas            del Cordero            (Ap.19,7-10) con su Iglesia (nosotros), sabiendo            que rechazamos el Amor de Dios, que está derramando toda su            Sangre por nuestros            pecados personales, nos auto-condenamos a estar eternamente            sin Amor: si una            novia falta a su boda, es ella la que se aparta del amor del            Novio para            siempre, sabiendo que Él da la Vida por ella en el altar.            Idolatramos aquello            que preferimos a Él (descanso, comida, trabajo, compañía,            flojera). Por eso, es            pecado mortal faltar sin causa grave a la Misa dominical y            fiestas (Catecismo            2181; Mt 16, 18-19; Ex 20,8-10; Tb 1,6; Hch 20,7; 2 Ts 2,15).          "Te amo,            pero quiero verte todos los días, y menos los de descanso".            ¿Qué pensaríamos si            un cónyuge le dice eso a otro? ¿Le ama realmente? Estamos en            el mundo para ser felices            para siempre, santos. Para lograr la santidad, la perfección            del amor, es            necesaria la Misa y comunión, si es posible, diaria, como pide            la Cátedra de            Pedro, el representante de Cristo en la tierra (Canon 904). Antes de comulgar            debemos confesar todos los pecados mortales: "quien come y bebe sin discernir el Cuerpo,              come y bebe su propia              condenación" (1 Cor 11,29; Rm 14,23). ¿Otros pecados            mortales? no            confesarse con el Sacerdote al menos una vez al año (CDC 989),            no comulgar al            menos en tiempo pascual (920), abortar (todos            los métodos anticonceptivos            no barrera son abortivos), promover el aborto (derecho a            decidir, derechos            (i)reproductivos, fecundación artificial), planificación            natural sin causa            grave, deseo o actividad sexual fuera del matrimonio por            iglesia, demorar en            bautizar a los niños, privar de Misa a niños en uso de razón,            borrachera,            drogas, comer a reventar, envidia, calumnia, odio o deseo de            venganza, ver            pornografía, robo importante, chiste o burla de lo sagrado,            etc. Si no            ponemos los medios para confesamos lo antes posible y nos            sorprende la muerte            sin arrepentirnos, nos auto-condenamos al infierno eterno            (Catecismo 1033-41;            Mt. 5,22; 10,            28; 13,41-50; 25, 31-46; Mc 9,43-48, etc.). Estos son pecados            mortales objetivamente,            pero subjetivamente,            pueden ser menos graves,            si hay atenuantes como la ignorancia. Pero ahora que lo sabes,            ya no hay            excusa.
† Misal
mar          26a. Ordinario año impar
      Antífona de Entrada
      A los              que esperan en ti, Señor, concédeles tu paz; cumple así las              palabras de tus              profetas; escúchame, Señor, atiende las plegarias de tu              pueblo.
Oración            Colecta
      Oremos:
            Míranos, Señor, con ojos de misericordia, y haz que            experimentemos vivamente tu            amor para que podamos servirte con todas nuestras fuerzas. 
            Por nuestro Señor Jesucristo...
            Amén.
Primera            Lectura
      Vendrán              numerosos pueblos a buscar al Señor en Jerusalén
Lectura              del libro del profeta Zacarías 8, 20-23
Esto dice el Señor            todopoderoso: 
            "Vendrán pueblos y habitantes de muchas ciudades. Y los            habitantes de una ciudad            irán a ver a los de la otra y les dirán: "Vayamos a rezar ante            el Señor y            a implorar la ayuda del Señor todopoderoso". "Yo también voy".            Y            vendrán numerosos pueblos y naciones poderosas a rezar ante el            Señor Dios en            Jerusalén y a implorar su protección".
            Esto dice el Señor todopoderoso:
            "En aquellos días, diez hombres de cada lengua extranjera            tomarán por el            borde del manto a un judío y le dirán: 
            "Queremos ir contigo, pues hemos oído decir que Dios está con            ustedes"".
            Palabra de Dios.
            Te alabamos, Señor.
Salmo Responsorial
      Del              salmo 86
Dios              está con nosotros.
Jerusalén            gloriosa, el Señor ha puesto en ti su templo. Tú eres más            querida para Dios que            todos los santuarios de Israel.
            Dios está con nosotros.
De ti,            Jerusalén, ciudad del Señor, se dirán maravillas. Egipto y            Babilonia adorarán            al Señor; los filisteos, con Tiro y Etiopía, serán como tus            hijos.
            Dios está con nosotros.
Y de            ti, Jerusalén, afirmarán: "Todos los pueblos han nacido en ti            y el            Altísimo es tu fortaleza".
            Dios está con nosotros.
El Señor            registrará en el libro de la vida a cada pueblo, convertido en            ciudadano tuyo;            y todos los pueblos cantarán bailando: "Tú eres la fuente de            nuestra            salvación".
            Dios está con nosotros.
Aclamación            antes del Evangelio
      Aleluya, aleluya.
            Jesucristo vino a servir y a dar su vida por la salvación de            todos. 
            Aleluya.
Evangelio
      Jesús tomó la firme              determinación de ir a Jerusalén
† Lectura del santo              Evangelio según san Lucas 9, 51-56
Gloria a ti, Señor.
Cuando ya se acercaba el            tiempo en que tenía que salir de este mundo, Jesús tomó la            firme determinación            de emprender el viaje a Jerusalén. Envió mensajeros por            delante y ellos fueron            a una aldea de Samaria para conseguirle alojamiento; pero los            samaritanos no            quisieron recibirlo, porque supieron que iba a Jerusalén. Ante            esta negativa,            sus discípulos Santiago y Juan le preguntaron:
            "Señor, ¿quieres que hagamos bajar fuego del cielo para que            acabe con            ellos?"
            Pero Jesús se volvió hacia ellos y los reprendió. Después se            fueron a otra            aldea.
            Palabra del Señor.
            Gloria a ti, Señor Jesús.
Oración            sobre las Ofrendas
      Acepta, Señor, con bondad            los dones y plegarias de tu pueblo, y haz que lo que cada uno            ofrece en tu            honor ayude a la salvación de todos. 
            Por Jesucristo, nuestro Señor.
            Amén.
Prefacio            
      La gloria de Dios es el              hombre viviente
En verdad es justo y            necesario, es nuestro deber y salvación, darte gracias siempre            y en todo lugar,            Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. 
            Tú eres el Dios vivo y verdadero; el universo está lleno de tu            presencia, pero            sobre todo has dejado la huella de tu gloria en el hombre,            creado a tu imagen.            Tú lo llamas a cooperar con el trabajo cotidiano en el            proyecto de la creación,            y le das tu Espíritu para que sea artífice de justicia y de            paz, en Cristo, el            hombre nuevo.
            Por eso,
            unidos a los ángeles y santos, cantamos con alegría el himno            de tu alabanza:
Antífona de la Comunión
      Señor              Dios, qué valioso es tu amor. Por eso los seres humanos se              acogen a la sombra              de tus alas.
Oración después de la Comunión
      Oremos:
            Que la gracia de esta comunión nos transforme, Señor, tan            plenamente que no sea            ya nuestro egoísmo, sino tu amor, el que impulse de ahora en            adelante nuestra            vida. 
            Por Jesucristo, nuestro Señor.
            Amén
___________________________________________________________________________________________
Dia 1/10          Santa Teresa del Niño Jesús (virgen, blanco)
      Antífona          de Entrada
      El Señor            fijó su mirada en ella, la instruyó y la cuidó como a las            niñas de sus ojos.
Oración          Colecta
      Oremos:
          Dios y Padre nuestro, que tienes abiertas las puertas de tu          Reino para los          humildes y sencillos de corazón, ayúdanos a llegar a ti, a          ejemplo de santa          Teresa del Niño Jesús, por el camino de la fidelidad en las          cosas pequeñas y el          cumplimiento de los deberes diarios.
          Por nuestro Señor Jesucristo...
          Amén.
Primera          Lectura
      Yo haré            correr la paz sobre ella como un río
Lectura            del libro del profeta Isaías 66, 10-14
A          légrense con Jerusalén, gocen con ella todos los que la aman,          alégrense de su          alegría todos los que por ella llevaron luto, para que se          alimenten de sus          pechos, se llenen de sus consuelos y se deleiten con la          abundancia de su          gloria. Porque dice el Señor:
          "Yo haré correr la paz sobre ella como un río y la gloria de las          naciones          como un torrente desbordado. Como niños serán llevados en el          regazo y          acariciados sobre sus rodillas; como un hijo a quien su madre          consuela, así los          consolaré yo. En Jerusalén serán ustedes consolados".
          Al ver esto se alegrará su corazón y sus huesos florecerán como          un prado. Y los          siervos del Señor conocerán su poder.
          Palabra de Dios.
          Te alabamos, Señor.
Salmo          Responsorial
      Del salmo            130
Dame,            Señor, la paz junto a ti.
Señor, mi          corazón no es ambicioso ni mis ojos, soberbios; grandezas que          superan mis          alcances ni de lejos pretendo.
          Dame, Señor, la paz junto a ti.
Estoy,          Señor, por lo contrario, tranquilo y en silencio, como niño          recién alimentado,          en los brazos maternos.
          Dame, Señor, la paz junto a ti.
Que igual          en el Señor esperen, los hijos de Israel, ahora y siempre.
          Dame, Señor, la paz junto a ti.
Aclamación          antes del Evangelio
      Aleluya,            aleluya.
          Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y la tierra, porque has          revelado los misterios          del Reino a la gente sencilla.
          Aleluya.
Evangelio
      Si no se            hacen como los niños, no entrarán en el Reino de los cielos
† Lectura            del santo Evangelio según san Mateo 18, 1-5
Gloria a            ti, Señor.
En cierta          ocasión, los discípulos se acercaron a Jesús y le preguntaron:
          "¿Quién es más grande en el Reino de los cielos?"
          Jesús llamó a un niño, lo puso en medio de ellos y les dijo:
          "Yo les aseguro a ustedes que si no cambian y no se hacen como          los niños,          no entrarán en el Reino de los cielos. Así pues, quien se haga          pequeño como          este niño, ése es el más grande en el Reino de los cielos. Y el          que reciba a un          niño como éste en mi nombre, me recibe a mí".
          Palabra del Señor.
          Gloria a ti, Señor Jesús.
Oración          sobre las Ofrendas
      Acepta,          Señor, el sacrificio de alabanza que vamos a ofrecerte en esta          festividad de          santa Teresa del Niño Jesús, y concédenos que también nuestra          vida sea          agradable a tus ojos.
          Por Jesucristo, nuestro Señor.
          Amén.
Prefacio
      La vida            consagrada a Dios es un signo Del Reino de los cielos
En verdad          es justo y necesario que te alaben, Señor, tus criaturas del          cielo y de la          tierra.
          Porque al celebrar a los santos que por amor al Reino de los          cielos se          consagraron a Cristo,
          reconocemos tu Providencia admirable, que no cesa de llamar al          hombre a la          santidad primera,
          para hacerlo participar ya desde ahora de la vida que gozará en          el cielo, por          Cristo, Señor nuestro.
          Por eso,
          con todos los ángeles y santos, te alabamos proclamando sin          cesar:
Antífona          de la Comunión
      A menos            que cambien y se hagan tan sencillos como niños, no entrarán            al Reino de los            cielos, dice el Señor.
Oración          después de la Comunión
      Oremos:
          Señor, que esta sagrada comunión encienda en nosotros aquel amor          que inspiró a          santa Teresa del Niño Jesús el deseo de ofrecerte su vida por la          salvación de          todos los hombres.
        Por          Jesucristo, nuestro Señor.
          Amén
___________________________________________________________________________________________
† Meditación diaria
26ª Semana. Martes
CAMINO DE JERUSALÉN
— No desanimarnos por          nuestros defectos: el Señor cuenta con ellos y con nuestro          empeño por arrancarlos.
— La ayuda incesante          del Espíritu Santo.
— El defecto            dominante.
I. Cuando ya estaba          cerca el tiempo de su partida, Jesús decidió firmemente            marchar hacia            Jerusalén. Y al entrar en una ciudad de samaritanos no le          acogieron porque            daba la impresión de ir a Jerusalén1. El Señor,          lejos de tomar          ninguna represalia contra aquellos samaritanos que no tuvieron          con Él las          mínimas muestras de hospitalidad, tan arraigadas en Oriente, ni          siquiera habla          mal de ellos; no les critica, sino que se fueron a otra            aldea. La reacción          de los Apóstoles fue muy distinta. Santiago y Juan le          propusieron a Jesús: ¿Quieres            que mandemos que caiga fuego del cielo y los consuma? Y el          Señor aprovecha          la ocasión para enseñarles que es preciso querer a todos,          comprender incluso a quienes          no nos comprenden.
Muchos pasajes del          Evangelio nos señalan los defectos de los Apóstoles aún sin          limar, y cómo van          calando en su corazón las palabras y el ejemplo del Maestro.          Dios cuenta con el          tiempo y con las flaquezas y defectos de sus discípulos de todas          las épocas.          Pocos años más tarde, el Apóstol San Juan escribirá: El que            no ama no conoce            a Dios, porque Dios es caridad2. ¡Se convierte          en el Apóstol de          la caridad y del amor! Sin dejar de ser él mismo, el Espíritu          Santo fue          transformando poco a poco su corazón. El tema central de sus Cartas          es          precisamente la caridad. San Agustín, al comentar la primera de          ellas, dirá que          el Apóstol en este escrito "dijo muchas cosas, prácticamente          todas, acerca de          la caridad"3. Él es quien nos ha transmitido la          enseñanza de Jesús          acerca del mandamiento nuevo, por el que nos          distinguirán como          discípulos de Jesús4. Junto al Maestro aprendió bien          que si nos            amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor            alcanza en nosotros            su perfección5.
También conocemos por          la tradición algunos detalles de sus últimos años, que nos          confirman su desvelo          para que se mantuviera la fidelidad al mandamiento del amor          fraterno. Cuenta          San Jerónimo que cuando los discípulos le llevaban a las          reuniones de los          cristianos –pues por su ancianidad él no podía ir solo– repetía          constantemente:          "Hijitos, amaos los unos a los otros". Ante su insistencia le          preguntaron por          qué decía siempre lo mismo, y San Juan respondió: "Es el          mandamiento del Señor,          y si se cumple, él solo basta"6.
Para nosotros, que          nos vemos con tantos defectos, es un estímulo lleno de esperanza          meditar que          los santos también los tuvieron, pero lucharon, fueron humildes          y llegaron a la          santidad, incluso a sobresalir, como vemos en San Juan, en          aquello en que          parecían estar más lejos del espíritu de Cristo.
II. Después de          Pentecostés, el Espíritu Santo completó la formación de aquellos          que había          elegido para que fueran las columnas de su Iglesia, a pesar de          tantas          deficiencias. Desde entonces no ha cesado de actuar en las almas          de los          discípulos de Cristo de todas las épocas. Sus inspiraciones son          a veces rápidas          como el relámpago: nos sugiere en lo más íntimo del alma que          seamos generosos          en una pequeña mortificación, que tengamos paciencia ante una          adversidad, que guardemos          los sentidos... En unas ocasiones actúa directamente moviendo al          bien,          sugiriendo, inspirando. Otras lo hace a través de los consejos          recibidos en la          dirección espiritual, de un acontecimiento, de la actitud          ejemplar de otra          persona, de la lectura de un libro bueno... Él quiere situar "en          el edificio de          mi vida la piedra que conviene colocar en aquel momento preciso          y que es          reclamada, digámoslo así, por el plano del edificio, según el          estado actual de          la construcción"7, del gran proyecto que Dios tiene          sobre nuestra          vida, el cual no quiere llevar a cabo sin nuestra colaboración.          Y todo está          ordenado, unas veces permitido y otras enviado por nuestro Padre          Dios, para que          alcancemos la santidad, el fin para el que hemos sido creados y          en que consiste          nuestra plena felicidad aquí en la tierra y después, por toda la          eternidad, en          el Cielo. También el dolor, el sufrimiento o el fracaso que Dios          permite están          orientados a ese fin más alto, que nunca debemos perder de          vista: Esta es la            voluntad de Dios, vuestra santificación8.
Dios nos ama siempre:          cuando nos da consuelos y cuando permite la molestia, la          aflicción, el          sufrimiento, la pobreza, el fracaso... Es más, "Dios no me ama          nunca tanto como          cuando me envía un sufrimiento"9. Es una "caricia          divina" por la que          debemos dar siempre gracias. San Lucas nos habla, en el          Evangelio que          meditamos, de la firmeza con que Jesús marcha hacia Jerusalén,          donde le espera          la Cruz.
San Juan no cambió en          un instante. Ni siquiera después de las palabras de Jesús. Pero          no se desanimó          ante sus errores, puso empeño, permaneció junto al Maestro, y la          gracia hizo el          resto. Es lo que nos pide Dios a nosotros. Cuando, al pasar los          años, el          Apóstol recordara este y otros muchos acontecimientos en los que          se encontraba          lejos del espíritu de su Maestro, vendría a su memoria también          la paciencia que          Jesús usó con él, las veces que tuvo que recomenzar, y esto le          ayudaría a amar          más al que una tarde inolvidable le llamó para que le siguiera.
III. Dios concedió a          San Juan una particular profundidad y finura en la caridad,          tanto en su vida          –¡el Señor lo destinó para que se hiciera cargo de su Madre!–          como en sus          enseñanzas. Él escribió, movido por el Espíritu Santo, estas          palabras llenas de          sabiduría: En esto se conocen los hijos de Dios y los hijos            del diablo. El            que no practica la justicia no es de Dios, y tampoco el que no            ama a su hermano10.          Nosotros no debemos desanimarnos por nuestros errores y          flaquezas: el Señor          cuenta con ellos, con el tiempo, con la gracia, y con nuestros          deseos de luchar.
Para combatir con          eficacia en la vida interior debemos conocer bien lo que los          autores          espirituales han llamado el defecto dominante, el que en          cada uno tiende          a prevalecer sobre los demás y, como consecuencia, se hace          presente en la          manera de opinar, de juzgar, de querer y de obrar11.          Es aquel que de          alguna manera se manifiesta en lo que hacemos, queremos,          pensamos: la vanidad,          la pereza, la impaciencia, la falta de optimismo, la tendencia a          juzgar mal...          No subimos todos por el mismo camino hacia la santidad: unos han          de fomentar          sobre todo la fortaleza; otros, la esperanza o la alegría. "En          la ciudadela de          la propia vida interior, el defecto dominante es el punto débil,          el lugar          desguarnecido. El enemigo de las almas busca precisamente, en          cada uno, ese          punto débil, fácilmente vulnerable, y con facilidad lo          encuentra. Por          consiguiente, nosotros también debemos conocerlo"12.          Para esto es          preciso preguntarnos dónde tenemos puestos habitualmente          nuestros deseos, qué          es lo que más nos preocupa, lo que nos hace sufrir a menudo o lo          que con          frecuencia nos lleva a perder la paz o a caer en la tristeza...          También está          relacionado con el defecto dominante el mayor número de          tentaciones que          padecemos, pues es por donde el enemigo nos ve más débiles y,          por eso mismo,          por donde más ataca.
Para avanzar en la          vida interior debemos conocer este punto flaco, y pedir con          sinceridad a Dios          su gracia para vencerlo: "Aparta, Señor, de mí, lo que me aparte          de Ti", le          repetiremos en incontables ocasiones; junto con la petición          frecuente al Señor,          el propósito firme de no pactar nunca con nuestros defectos, y          aplicarles el examen            particular, el examen breve y frecuente sobre ese defecto          dominante que se          pretende arrancar y sobre la virtud que se quiere adquirir: "Con          el examen          particular has de ir derechamente a adquirir una virtud          determinada o a          arrancar el defecto que te domina"13. En la dirección          espiritual          encontraremos una formidable ayuda para mantener esta lucha          esperanzada hasta          el final de nuestros días.
En María, nuestra          Madre, encontraremos siempre la paz y el gozo para caminar hasta          el Señor, pues          "nuestra andadura ha de ser alegre, como la de la Virgen; pero          como la de Ella,          conociendo la experiencia del dolor, el cansancio del trabajo,          el claroscuro de          la fe.
"Marchemos de la mano          de María, la llena de gracia. Dios Padre, Dios Hijo, Dios          Espíritu Santo le han          colmado de dones, han hecho una criatura perfecta; es de nuestra          raza y tiene          por misión repartir solo cosas buenas. Más. Ella se nos ha          convertido en vida,          dulzura y esperanza nuestra.
"María, la Madre de          Jesús, "signo de consuelo y de esperanza segura" (Conc. Vat. II,          Const. Lumen            gentium, 68), marcha por la tierra Iluminando con su luz          al Pueblo de Dios          peregrinante.
"Ella, nuestra Madre,          es el camino, la senda, el atajo para llegar al Señor. María          llenará de alegría          nuestras labores, nuestras tinajas, nuestros andares"14.
1 Lc 9, 52-56.          — 2 1 Jn 4, 8. — 3 San Agustín, Comentario            a la Primera            Carta de San Juan, prólogo. — 4 Cfr. Jn          13, 34-35. — 5          1 Jn 4, 12. — 6 San Jerónimo, Comentario a la            Epístola a los            Gálatas, III, 6. — 7 J. Tissot, La vida            interior, Herder, 16ª          ed., Barcelona 1964, p. 287. — 8 1 Tes, 4, 3. —          9 J.          Tissot o. c., p. 293. — 10 1 Jn 3, 10. —          11 Cfr. R.          Garrigou-Lagrange, La tres edades de la vida interior,          vol. I, pp. 365          ss. — 12 Ibídem, 367. — 13 San Josemaría          Escrivá, Camino,          n. 241. — 14 J. Urteaga, Los defectos de los santos,          Rialp, 3ª          ed., Madrid 1982, pp. 380-381.
___________________________________________________________________________________________
† Santoral               (si          GoogleGroups corta el texto,          lo encontrará en www.iesvs.org)
Santa Teresita del 
            Niño Jesús, Virgen.
          
          Fiesta:  1ro de octubre.
                                                                                                               Santa                    Teresita del Niño Jesús (Thérèse) angelrentre  19/08/2012 05:47:43 Santa Teresita del Niño Jesús (Thérèse) Rafael A.  02/12/2011 17:42:10 SANTA TERESITA DE LISIEUX. Santa Teresa                    del Niño Jesús: Una mirada, una sonrisa sanmiguelillo  04/11/2008 20:19:01 corazoncatolico  20/04/2011 21:58:28 Santa Teresita de Lisieux … Documental en el centenario de su muerte MONKADOSH29  25/06/2013 16:09:39 SANTA TERESITA DE LISIEUX … mi pequeña flor derama sobre el mudo lluviade petalos de rosa para la paz del mundo entero tratarentreamigos  22/12/2008 20:19:50 Santa Teresita del Niño Jesús … los cristianos que              admiramos la vida de estasanta del carmelo Santa                    Teresita del Niño Jesús - Dibujos Animados José Luis rh  17/09/2011 09:45:58 Santa Teresita del Niño Jesús - Dibujos Animados … Santa Teresita y su pequeño camino              hacia la santidad. Frases y                    anécdota de santa Teresita del niño Jesús Retazos                    y puntadas  01/10/2012 12:01:34 Frases              y anécdota de santa Teresita del niño Jesús … ¡Oh Santa Teresita del Niño Jesús,              modelo de humildad, de              confianza … DERRAMARÉ UNA                    LLUVIA DE ROSAS (SANTA TERESITA) 48josefina  30/09/2012 16:57:04 DERRAMARÉ              UNA LLUVIA DE ROSAS (SANTA TERESITA) Poemas                    cantados de Santa Teresita del niño Jesús (de lisieux) vidanet  16/09/2012 03:35:07 Poemas              cantados de Santa Teresita del niño Jesús (de lisieux)              … Arreglo musical de los poemas de Santa Teresita del Niño Jesús              convertidos en hermosas …              Lomeli. El video es de la vida de Teresita de Lisieux con subtitulos en              español. 01-SI  HUBIERA              COMETIDO … Música                    Católica_Vivir de Amor. Alelina  06/03/2013 05:31:34 Música              Católica_Vivir de Amor. … Música              Católica Santa Teresita de LisieuxVivir de amor es darse sin              medida, sin … en la              tierra. Yo me doy sin cuenta bien segura de que en amor el              cálculo no entra. Lo              he              dado todo … Lo que agrada                    a Dios - Santa Teresita de Lisieux Astrid                    Hernández  04/03/2013 16:31:09 Lo              que agrada a Dios - Santa Teresita de Lisieux … 2010 Bella canción              inspirada en los              escritos de Santa Teresita del Niño Jesus. 
Por medio de sus cartas,          los testimonios de aquellos          que la conocieron, y especialmente su autobiografía, "La          Historia de un          Alma", millones han llegado a conocer sus grandes dones y          virtudes.          Incontables peregrinos visitan el convento carmelita de Lisieux,          donde, el 9 de          abril de 1888, María Francisca Teresa Martín, la hija menor del          relojero Luis          Martín, se convirtió en la novicia más joven. Tenía sólo quince          años. Estaban          ya allí dos de sus hermanas: María, la mayor, se había ido          cuando Teresita          tenía nueve años, y Paulina, que había cuidado de la familia          después de morir          su madre, entró cuando Teresita tenía catorce años. Impaciente          por seguirlas, fue          a Roma en una peregrinación con su padre, y rompiendo la regla          del silencio en          presencia del Papa, le pidió permiso de entrar al Carmelo a los          quince años.          "Entrarás si es la voluntad de Dios", le contestó el Papa León          XIII,          y Teresita terminó la peregrinación con el espíritu lleno de          esperanza. Al          terminar el año, el permiso que anteriormente la había sido          negado, le fue          concedido por el obispo y Teresita entró al Carmelo.
Teresa había sido la hija          preferida de su padre; era          tan alegre, atractiva y amable, que los dos sufrieron          intensamente cuando llegó          el momento de la separación. Pero no le cabía la menor duda de          que ésa era su          vocación y desde el principio se determinó a ser santa. Aunque          la salud de          Teresita era muy delicada, no deseó ninguna dispensa de la          austera regla y no          le fue dada ninguna. Sufría intensamente por el frío y por el          cansancio de cumplir          con algunas de las penitencias físicas y exteriores que la Regla          acostumbraba.          "Soy un alma muy pequeña, que sólo puede ofrecer cosas muy          pequeñas a          Nuestro Señor," dijo en una ocasión, "pero quiero buscar un          camino          nuevo hacia el cielo, muy corto, muy recto, un pequeño          sendero…Estamos en la          era de los inventos. Me gustaría encontrar un elevador para          ascender hasta          Jesús, pues soy demasiado pequeña para subir los empinados          escalones de la          perfección…".
"Lo que me impulsa a ir al          Cielo es el          pensamiento de poder encender en amor de Dios una multitud de          almas que le          alabarán eternamente."
Su gran anhelo es que aquellos que la          invocan amen a Dios con un amor          abrazador.
"La Florecita", como          muchos la llaman,          encontró su elevador, que la llevó velozmente por entre períodos          oscuros de          sufrimiento espiritual, por entre largas noches de dolor          corporal, hacia          arriba, siempre arriba, hasta que al fin estuvo segura en brazos          de su amado          Jesús. Antes de morir, terminó su autobiografía, L'Histoire            d'un Alme          (La Historia de un Alma), escrita a petición de su Superiora. Ha          sido traducida          a muchos diferentes idiomas, y está llena de belleza, sabiduría          y valor, y por          ella podemos saber algo de la santidad de Teresita, pues explica          cómo hizo de          sí misma un juguete de Cristo. Hiciera lo que hiciera, estaba          segura de su          amor.
La hermana Teresita de          Lisieux murió el 30 de          Septiembre de 1897. En junio de ese año había sido llevada a la          enfermería del          convento, padeciendo fuertes hemorragias, y no volvió a salir de          allí. Tres de          sus declaraciones, pronunciadas por ese tiempo, le han dado la          vuelta al mundo          y ningún comentario sobre la Florecita, por breve que fuera,          estaría completo          sin ellas: "Nunca he dado a Dios más que amor, y Él me pagará          con amor.          Después de mi muerte dejaré caer una lluvia de rosas." "Pasaré          mi          Cielo haciendo bien sobre la tierra." "Mi caminito es el camino          de la          infancia espiritual, el camino de la confianza y de la entrega          absoluta."
Casi inmediatamente          después de su muerte, fueron tan          numerosos los milagros obtenidos por su intercesión, que la          Santa Sede dispensó          los acostumbrados cincuenta años que normalmente deben          transcurrir antes que se          inicie el proceso de canonización. En 1922 fue solemnemente          beatificada por el          Papa Pío XI, y dos años más tarde fue canonizada Teresa de          Lisieux.
Como una de las          principales obligaciones de las          carmelitas es pedir por las misiones, no es extraño que, en          1927, Santa          Teresita fuera nombrada Patrona celestial de todas las Misiones          Extranjeras,          junto con San Francisco Javier. Dijo Teresita: "Quisiera ser          misionera          ahora y siempre y en todas las misiones."
Lo mismo para los          católicos que para los no católicos,          Teresita sigue dejando caer su lluvia de rosas, y los que son          suficientemente          prudentes para recoger los preciosos pétalos, se encuentran          atraídos          irresistiblemente hacia Jesús.
(La mayor parte de esta          pequeña biografía ha sido          extraída de "Nuestra Herencia Católica" tomo III, publicada por          La          Prensa Católica, México, 1973)

          
        
        "Mi caminito es el camino de una infancia          espiritual, el camino de          la confianza y de la entrega absoluta." 
La          Iglesia reconoce la          enseñanza profunda y valiosa del "caminito" de Santa Teresita,          lo          cual conlleva el aceptar nuestras propias limitaciones, y el dar          de todo          corazón lo que tengamos, no importa lo pequeña que sea la          ofrenda.
          
        
        
          
          
          "Después de mi muerte haré caer una lluvia de rosas". "Pasaré mi          Cielo haciendo bien sobre la tierra". 
Teresita          sigue dejando caer          su lluvia
          de rosas, y los que son suficientemente prudentes para recoger          los preciosos          pétalos, se encuentran atraídos 
___________________________________________________________________________________________
Fuente:          ar.geocities.com/misa_tridentina01 
        Romano "el Melódico",            Santo          Diacono, Octubre 1   
              
 Poeta litúrgico Martirologio                    Romano: En Constantinopla, san Romano, diácono,                      que fue apellidado Melódico por su sublime pericia                      artística en componer himnos eclesiásticos en honor                      del Señor y de los santos (c. 500).  |           
___________________________________________________________________________________________
Fuente: Vatican.va 
        Luis Maria Monti, Beato Laico          Fundador, 1 de octubre   
              
 Fundador de los               |           
___________________________________________________________________________________________
Fuente:          ar.geocities.com/misa_tridentina04/ 
        Eduardo Campion (Geraldo            Edwards), Santo, y beatos            compañeros mártires Mártires en Inglaterra,          Octubre 1   
              
 Mártires Martirologio                    Romano: En Canterbury, en Inglaterra, san Geraldo                      Edwards, presbítero y mártir, en cual fue ordenado                      en Francia y, al regresar a su patria, en la                      persecución durante el reinado de Isabel I, después                      de un largo encarcelamiento consumó su martirio en                      el patíbulo. Con él fueron martirizados los                      presbíteros beatos Roberto Wilcox y Cristóbal                      Buxton, por su condición sacerdotal, y el beato                      Roberto Widmerpool, por ayudar a un sacerdote                      (1588).  |           
___________________________________________________________________________________________
Fuente:          ar.geocities.com/misa_tridentina01 
        Bavón de Gante, Santo Monje,          Octubre 1   
              
 Monje Martirologio                    Romano: En Gante, de Flandes, en Neustria, san                      Bavón, monje, que, discípulo de san Amando, dejó la                      vida seglar, distribuyó sus bienes entre los pobres                      y entró en el monasterio fundado en esta ciudad (c.                      659).  |           
___________________________________________________________________________________________
Fuente: siame.com.mx 
        Juan de Palafox y            Mendoza, Venerable          Obispo, 1 de octubre   
              
 Primer Obispo de                  Puebla (México)               |           
___________________________________________________________________________________________
Fuente: Martirologio          Romano 
        Otros Santos y Beatos          Completando el santoral de este día, Octubre 1   
              
 San Piatón,                    presbítero  |           
Fuentes:          IESVS.org; EWTN.com;          Colección Hablar con Dios de www.FranciscoFCarvajal.org de www.edicionespalabra.es ,          misalpalm.com, Catholic.net
Mensajes anteriores en: http://iesvs-org.blogspot.com/ 
Si NO desea el evangelio,          santoral y meditación diaria          y sólo artículos interesantes censurados por la prensa (la          mayoría), unos 4 por          semana escriba a: ave-maria-purisima+subscribe@googlegroups.com (responder el mensaje de          confirmación).
Para de-suscribirse          escribir desde su casilla de email          a:
Evangelio+unsubscribe@googlegroups.com
NO debe colocarlo en CC          sino en "Para/To"
Si no se desuscribe es          porque recibe el mensaje en su          otro email que le reenvía al actual: debe escribir desde ese          otro email.





















