viernes, 23 de noviembre de 2012

Sábado 24 de Noviembre de 2012. En su día, lo que más agrada a María, es la Misa matutina.

JMJ

Pax

† Lectura del santo Evangelio según san Lucas 20, 27-40

Gloria a ti, Señor.

En aquel tiempo se acercaron a Jesús unos saduceos, que niegan la resurrección, y le preguntaron: 
"Maestro, Moisés nos dejó escrito: Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero sin hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano. Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos. El segundo y el tercero se casaron con la viuda, y así los siete. Todos murieron sin dejar hijos. Por último murió la viuda. Ahora bien, cuando llegue la resurrección, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete estuvieron casados con ella".
Jesús les dijo: 
"En esta vida, hombres y mujeres se casan; pero en la vida futura, los que sean juzgados dignos de ella y de la resurrección de los muertos no se casarán. Pues ya no pueden morir, son como ángeles; son hijos de Dios, porque han resucitado. Y que los muertos resucitan, el mismo Moisés lo indica en el episodio de la zarza, cuando llama al Señor Dios de Abrahán, Dios de Isaac, Dios de Jacob. No es un Dios de muertos, sino de vivos, porque para él todos viven".
Entonces unos escribas le dijeron: 
"Maestro, has hablado bien". 
Y ya no se atrevían a hacerle más preguntas.
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor, Jesús.

Suplicamos su oración: Esto es gratis pero cuesta. No sería posible sin sus oraciones: al menos un Avemaría de corazón por cada email que lea. Dios te salve María, llena eres de Gracia, el Señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús; Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. ¡Recuérdenos en sus intenciones y misas!

Aclaración: una relación muere sin comunicación y comunidad-comunión. Con Dios es igual: las "palabras de vida eterna" (Jn 6,68; Hc 7,37) son fuente de vida espiritual (Jn 6, 63), pero no basta charlar por teléfono (oración), es necesario visitarse, y la Misa permite ver a Jesús, que está tan presente en la Eucaristía, que Hostias han sangrado: www.therealpresence.org/eucharst/mir/span_mir.htm

Por leer la Palabra, no se debe dejar de ir a Misa, donde ofrecemos TODO (Dios) a Dios: al actualizarse el sacrificio de la Cruz, a) co-reparamos el daño que hacen nuestros pecados al Cuerpo de Cristo que incluye los Corazones de Jesús y de María, a Su Iglesia y nosotros mismos, b) adoramos, c) agradecemos y d) pedimos y obtenemos Gracias por nuestras necesidades y para la salvación del mundo entero… ¿Que pasa en CADA Misa? 5 minutos: http://www.youtube.com/watch?v=v82JVdXAUUs

Lo que no ven tus ojos (2 minutos): http://www.gloria.tv/?media=200354

Película completa (1 hora): http://www.gloria.tv/?media=272692

Si Jesús se apareciera, ¿no correríamos a verlo, tocarlo, adorarlo? Jesús está aquí y lo ignoramos. Jesús nos espera (Mc 14,22-24) en la Eucaristía: "si no coméis la carne del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros" (Jn 6,53; 1 Jn 5,12). Si comulgamos en estado de Gracia y con amor, nos hacemos uno (común-unión) con el Amor y renovamos la Nueva Alianza de Amor. Si faltamos a las bodas del Cordero (Ap.19,7-10) con su Iglesia (nosotros), sabiendo que rechazamos el Amor de Dios, que está derramando toda su Sangre por nuestros pecados personales, nos auto-condenamos a estar eternamente sin Amor: si una novia falta a su boda, es ella la que se aparta del amor del Novio para siempre, sabiendo que Él da la Vida por ella en el altar. Idolatramos aquello que preferimos a Él (descanso, comida, trabajo, compañía, flojera). Por eso, es pecado mortal faltar sin causa grave a la Misa dominical y fiestas (Catecismo 2181; Mt 16, 18-19; Ex 20,8-10; Tb 1,6; Hch 20,7; 2 Ts 2,15). "Te amo, pero quiero verte todos los días, y menos los de descanso". ¿Qué pensaríamos si un cónyuge le dice eso a otro? ¿Le ama realmente? Estamos en el mundo para ser felices para siempre, santos. Para lograr la santidad, la perfección del amor, es necesaria la Misa y comunión, si es posible, diaria, como pide la Cátedra de Pedro, el representante de Cristo en la tierra (Canon 904). Antes de comulgar debemos confesar todos los pecados mortales: "quien come y bebe sin discernir el Cuerpo, come y bebe su propia condenación" (1 Cor 11,29; Rm 14,23). ¿Otros pecados mortales? no confesarse con el Sacerdote al menos una vez al año (CDC 989), no comulgar al menos en tiempo pascual (920), abortar (todos los métodos anticonceptivos no barrera son abortivos), promover el aborto (derecho a decidir, derechos (i)reproductivos, fecundación artificial), planificación natural sin causa grave, deseo o actividad sexual fuera del matrimonio por iglesia, demorar en bautizar a los niños, privar de Misa a niños en uso de razón, borrachera, drogas, comer a reventar, envidia, calumnia, odio o deseo de venganza, ver pornografía, robo importante, chiste o burla de lo sagrado, etc. Si no ponemos los medios para confesamos lo antes posible y nos sorprende la muerte sin arrepentirnos, nos auto-condenamos al infierno eterno (Catecismo 1033-41; Mt. 5,22; 10, 28; 13,41-50; 25, 31-46; Mc 9,43-48, etc.). Estos son pecados mortales objetivamente, pero subjetivamente, pueden ser menos graves, si hay atenuantes como la ignorancia. Pero ahora que lo sabes, ya no hay excusa.

 

Misal

 

sab 33a. Ordinario año Par

Antífona de Entrada

Vi al Señor sentado en un trono excelso; lo adoraban una multitud de ángeles que cantaban a una sola voz: "Este es Aquél cuyo poder permanece eternamente".

Oración Colecta

Oremos:
Escucha, Señor, con bondad las súplicas de tu pueblo, y concédenos luz para conocer tu voluntad y fortaleza para cumplirla.
Por nuestro Señor Jesucristo...
Amén.

Primera Lectura

Estos dos profetas habían sido el azote de los habitantes de la tierra

Lectura del libro del Apocalipsis del apóstol san Juan 11, 4-12

Yo, Juan, oí que me decían:
"Aquí están mis dos testigos, los dos olivos y los dos candelabros que están en presencia del Señor de la tierra. Si alguno quiere hacerles daño, su boca echará fuego y devorará a sus enemigos; así, el que intente hacerles daño, morirá sin remedio. 
Tienen poder de cerrar el cielo para que no llueva mientras dure su misión profética; tienen poder para convertir el agua en sangre y herir la tierra a voluntad con toda clase de plagas. 
Pero, cuando terminen su misión, la bestia que sube del abismo les hará la guerra, los vencerá y los matará. Sus cadáveres yacerán en la plaza de la gran ciudad, simbólicamente llamada Sodoma y Egipto, donde también su Señor fue crucificado. Durante tres días y medio, gente de todo pueblo, raza, lengua y nación, contemplarán sus cadáveres y no permitirán que los sepulten. Los habitantes de la tierra se alegrarán por su muerte y se cambiarán regalos; porque estos dos profetas constituían un tormento para los habitantes de la tierra.
Pero después de los tres días y medio, un espíritu de vida enviado por Dios entró en ellos, y se pusieron en pie en medio del terror de todos los que lo veían. 
Oyeron entonces una voz potente que les decía desde el cielo: 
"Suban aquí". 
Y subieron al cielo en una nube, a la vista de sus enemigos".
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.

Salmo Responsorial

Sal 143, 1.2.9-10

Bendito el Señor, mi Roca.

Bendito el Señor, mi Roca, que prepara mis manos para la batalla, mis dedos para el combate.
Bendito el Señor, mi Roca.

Mi aliado fiel y mi defensa, mi fortaleza y mi salvador, el que me protege y pone bajo mi dominio a los pueblos.
Bendito el Señor, mi Roca.

Te cantaré, oh Dios, un canto nuevo, para ti tocaré el arpa de diez cuerdas: tú que das la victoria a los reyes, tú que salvas a tu siervo David. 
Bendito el Señor, mi Roca.

Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya.
Jesucristo, nuestro salvador, ha vencido la muerte y ha hecho resplandecer la vida por medio del Evangelio. 
Aleluya.

Evangelio

No es Dios de muertos, sino de vivos

† Lectura del santo Evangelio según san Lucas 20, 27-40

Gloria a ti, Señor.

En aquel tiempo se acercaron a Jesús unos saduceos, que niegan la resurrección, y le preguntaron: 
"Maestro, Moisés nos dejó escrito: Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero sin hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano. Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos. El segundo y el tercero se casaron con la viuda, y así los siete. Todos murieron sin dejar hijos. Por último murió la viuda. Ahora bien, cuando llegue la resurrección, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete estuvieron casados con ella".
Jesús les dijo: 
"En esta vida, hombres y mujeres se casan; pero en la vida futura, los que sean juzgados dignos de ella y de la resurrección de los muertos no se casarán. Pues ya no pueden morir, son como ángeles; son hijos de Dios, porque han resucitado. Y que los muertos resucitan, el mismo Moisés lo indica en el episodio de la zarza, cuando llama al Señor Dios de Abrahán, Dios de Isaac, Dios de Jacob. No es un Dios de muertos, sino de vivos, porque para él todos viven".
Entonces unos escribas le dijeron: 
"Maestro, has hablado bien". 
Y ya no se atrevían a hacerle más preguntas.
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor, Jesús.

Oración sobre las Ofrendas

Acepta, Señor, el sacrificio que vamos a ofrecerte, y, por sus méritos, escucha nuestras filiales oraciones y santifica toda nuestra vida.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.

Prefacio

Restauración universal en Cristo

En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación, darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro. 
A quien hiciste fundamento de todo y de cuya plenitud quisiste que participáramos todos. El cual, siendo Dios, se anonadó a sí mismo, y por su sangre derramada en la cruz, puso en paz todas las cosas; y así, 
constituido Señor del universo, es fuente de salvación eterna para cuantos creen en él.
Por eso, 
con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:

Antífona de la Comunión

Señor, en ti está la fuente de la vida, y tu luz nos hace ver la luz.

Oración después de la Comunión

Oremos:
A quienes has alimentado con tus sacramentos, concédeles, Dios todopoderoso, servirte con una vida que te sea agradable.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.

 

 

Dia 24/11 San Andrés Dung-Lac (presbítero y compañeros mártires, rojo)

Antífona de Entrada

En la tierra los santos mártires han derramado su sangre por Cristo; por eso han alcanzado el premio eterno.

Oración Colecta

Oremos:
Aumenta, Señor, en nosotros aquella fe que tus santos mártires Andrés y compañeros conservaron hasta la muerte, y haz que nos justifique por haberla guardado con fidelidad.
Por nuestro Señor Jesucristo...
Amén.

Primera Lectura

Alégrense de compartir los padecimientos de Cristo

Lectura de la primera carta del apóstol san Pedro
4, 12-19

Queridos hermanos: No se extrañen de verse sometidos al fuego de la prueba, como si fuera algo nunca visto. Al contrario, alégrense de compartir ahora los padecimientos de Cristo, para que, cuando se manifieste su gloria, el júbilo de ustedes sea desbordante. Si los injurian por el nombre de Cristo, ténganse por dichosos, porque la fuerza y la gloria del Espíritu de Dios descansan sobre ustedes.
Pero que ninguno de ustedes tenga que sufrir por criminal, ladrón, malhechor o simplemente por entrometido. En cambio, si sufre por ser cristiano, que le dé gracias a Dios por llevar ese nombre.
Pues ha llegado el tiempo del juicio definitivo, que comienza por el mismo pueblo de Dios. Y si comienza por nosotros, ¿qué podrán esperar los que se niegan a creer en el Evangelio? Pues si el bueno se salva a duras penas, ¿qué suerte correrán el impío y el pecador? Así pues, los que según la voluntad de Dios tienen que sufrir, que pongan toda su confianza en la fidelidad del creador y sigan haciendo el bien.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.

Salmo Responsorial

Del salmo 125

Entre gritos de júbilo cosecharán aquellos que siembran con dolor.

Cuando el Señor nos hizo volver del cautiverio, creíamos soñar: entonces no cesaba de reír nuestra boca, ni se cansaba entonces la: lengua de cantar.
Entre gritos de júbilo cosecharán aquellos que siembran con dolor.

Aun los mismos paganos con asombro decían: "Grandes cosas ha hecho por ellos el Señor". Y estábamos alegres, pues ha hecho cosas grandes por su pueblo el Señor.
Entre gritos de júbilo cosecharán aquellos que siembran con dolor.

Como cambian los ríos la suerte del desierto, cambia también ahora, nuestra suerte, Señor". y entre gritos de júbilo, cosecharán aquellos que siembran con dolor.
Entre gritos de júbilo cosecharán aquellos que siembran con dolor.

Al ir, iban llorando, cargando su semilla; al regresar, cantando vendrán con sus gavillas.
Entre gritos de júbilo cosecharán aquellos que siembran con dolor.

Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos, dice el Señor.
Aleluya.

Evangelio

No he venido a traer la paz, sino la guerra

† Lectura del santo Evangelio según san Mateo
10, 34-39

Gloria a ti, Señor.

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles:
"No piensen que he venido a traer la paz a la tierra; no he venido a traer la paz, si hija no la guerra. He venido a enfrentar al hijo con su padre, a la con su madre, a la nuera con su suegra, y los enemigos de cada uno serán los de su propia familia.
El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí.
El que salve su vida, la perderá y el que la pierda por mí, la salvará".
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.

Oración sobre las Ofrendas

Dios de bondad, que en san Andrés Dung-Lac y compañeros has querido destruir el hombre viejo y crear en él un hombre nuevo, a tu imagen; concédenos, por sus méritos, ser renovados por ti, como ellos lo fueron, para que podamos ofrecerte un sacrificio que te sea agradable.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.

Prefacio

Testimonio y ejemplo de los mártires

En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación, darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, nuestro Señor.
Porque la sangre del glorioso mártir san Andrés Dung&endash;Lac y compañeros, derramada como la de Cristo para proclamar su fidelidad a ti, manifiesta tu admirable poder, que convierte la fragilidad en fortaleza y al hombre débil robustece para que se testigo tuyo.
Por eso,
como los ángeles te cantan en el cielo, así nosotros en la tierra te aclamamos, diciendo si cesar:

Antífona de la Comunión

Créanme: Los que han dejado todo y me han seguido, recibirán cien veces más y heredarán la vida eterna.

 

Oración después de la Comunión

Oremos:
Te rogamos, Señor, que nosotros tus siervos, fortalecidos por este sacramento, aprendamos a buscarte sobre todas las cosas, a ejemplo de san Andrés Dung-Lac y compañeros, a ser nosotros, mientras vivamos en el mundo, la imagen del hombre nuevo.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén

___________________________________________________________________________________________

 

Meditación diaria

 

33ª semana. Sábado

AMAR LA CASTIDAD

— Sin la pureza es imposible el amor.

— Castidad matrimonial y virginidad.

— Apostolado sobre esta virtud. Medios para guardarla.

I. Vinieron los saduceos, que niegan la resurrección de los muertos, para proponer a Jesús una cuestión que, según ellos, reducía al absurdo esa verdad admitida comúnmente por el resto de los hebreos1. Según la ley judía2, si un hombre moría sin dejar hijos, el hermano tenía obligación de casarse con la viuda para suscitar descendencia a su hermano. Las consecuencias de esta ley se presentaban como un argumento aparentemente sólido contra la resurrección de los cuerpos. Pues si siete hermanos habían muerto sucesivamente sin dejar descendencia, en la resurrección ¿de quién será esposa?

El Señor contestó con citas de la Sagrada Escritura reafirmando la resurrección de los muertos, y, al enseñar las cualidades de los cuerpos resucitados, desvaneció el argumento de los saduceos. La objeción mostraba por sí misma una gran ignorancia en el poder de Dios para glorificar los cuerpos del hombre y de la mujer a una condición semejante a la de los ángeles que, siendo inmortales, no necesitan la reproducción de la especie3. La actividad procreadora se ciñe a unos años dentro de esta etapa terrena del hombre para cumplir la misión de propagar la especie y, sobre todo, de aumentar el número de elegidos para el Cielo. Lo definitivo es la vida eterna. Esta vida es solo un paso hacia el Cielo.

Mediante la virtud de la castidad, o pureza, la facultad generativa es gobernada por la razón y dirigida a la procreación y unión de los cónyuges dentro del matrimonio. La tendencia sexual se sitúa así en el orden querido por Dios en la creación, aunque –a causa del profundo desorden introducido en la naturaleza humana por el pecado original y por los pecados personales– a veces resulte precisa la lucha ascética para mantener esta ordenación.

La virtud de la castidad lleva también a vivir una limpieza de mente y de corazón: a evitar aquellos pensamientos, afectos y deseos que apartan del amor de Dios, según la propia vocación4. Sin la castidad es imposible el amor humano y el amor a Dios. Si la persona renuncia al empeño por mantener esta limpieza de cuerpo y de alma, se abandona a la tiranía de los sentidos y se rebaja a un nivel infrahumano: "parece corno si el "espíritu" se fuera reduciendo, empequeñeciendo, hasta quedar en un puntito... Y el cuerpo se agranda, se agiganta, hasta dominar"5, y el hombre se hace incapaz de entender la amistad con el Señor. En los primeros tiempos, en medio de un ambiente pagano hedonista, la Iglesia amonestó con firmeza a los cristianos sobre "los placeres de la carne, que como crueles tiranos, después de envilecer el alma en la impureza, la inhabilitan para las obras santas de la virtud"6. La pureza dispone el alma para el amor divino, para el apostolado.

II. La castidad no consiste solo en la renuncia al pecado. No es algo negativo: "no mirar", "no hacer", "no desear"... Es entrega del corazón a Dios, delicadeza y ternura con el Señor, "afirmación gozosa"7. Virtud para todos, que se ha de vivir según el propio estado. En el matrimonio, la castidad enseña a los casados a respetarse mutuamente y a quererse con un amor más firme, más delicado y más duradero. "El amor consigue que las relaciones conyugales, sin dejar de ser carnales, se revistan, por decirlo así, de la nobleza del espíritu y estén a la altura de la dignidad del hombre. El pensamiento de que la unión sexual está destinada a suscitar nuevas vidas tiene un asombroso poder de transfiguración, pero la unión física solo queda verdaderamente ennoblecida si procede del amor y es expresión de amor (...).

"Y cuando el sexo se desvincula completamente del amor y se busca por sí mismo, entonces el hombre abandona su dignidad y profana también la dignidad del otro.

"Un amor fuerte y lleno de ternura es, pues, una de las mejores garantías y sobre todo una de las causas más profundas de la pureza conyugal.

"Pero hay todavía una causa más alta. La castidad, nos dice San Pablo, es un "fruto del Espíritu" (cfr. Gal 5, 23), es decir, una consecuencia del amor divino. Para la guarda de la pureza en el matrimonio hace falta no solo un amor delicado y respetuoso por la otra persona sino sobre todo un gran amor a Dios. El cristiano que intenta conocer y amar a Jesucristo encuentra en este amor un poderoso estímulo para su castidad. Sabe que la pureza acerca de un modo especial a Jesucristo y que la cercanía de Dios, prometida a los que guardan limpio el corazón (cfr. Mt 5, 8), es la garantía principal de esa misma limpieza"8.

La castidad no es la primera ni la más importante virtud, ni la vida cristiana se puede reducir a la pureza, pero sin ella no hay caridad, y esta sí es la primera de las virtudes y la que da su plenitud a todas las demás. Sin la castidad, el mismo amor humano se corrompe. Quienes han recibido la llamada a servir a Dios en el matrimonio, se santifican precisamente en el cumplimiento abnegado y fiel de los deberes conyugales, que para ellos se hace camino cierto de unión con Dios. Quienes han recibido la vocación al celibato apostólico, encuentran en la entrega total al Señor y a los demás por Dios, indiviso corde9, sin la mediación del amor conyugal, la gracia para vivir felices y alcanzar una íntima y profunda amistad con Dios.

Si miramos hoy a Nuestra Señora –y en este día de la semana, el sábado, muchos cristianos la tienen especialmente presente–, vemos que en Ella se dan de modo sublime esas dos posibilidades que en el resto de las mujeres se excluyen: la maternidad y la virginidad. En nuestras tierras la llamamos muchas veces simplemente "la Virgen", la Virgen María. Y la tratamos como Madre. Fue voluntad de Dios que su Madre sea a la vez Virgen. La virginidad ha de ser, pues, un valor altísimo a los ojos de Dios, y encierra un mensaje importante para los hombres de todos los tiempos: la satisfacción del sexo no pertenece a la perfección de la persona. Las palabras de Jesús cuando resuciten de entre los muertos, ni se casarán ni serán dadas en matrimonio indican que "hay una condición de vida, sin matrimonio, en la que el hombre, varón y mujer, halla a un tiempo la plenitud de la donación personal y la comunión entre las personas, gracias a la glorificación de todo su ser en la unión perenne con Dios. Cuando la llamada a la continencia por el reino de los Cielos encuentra eco en el alma humana (...) no resulta difícil percibir allí una sensibilidad especial del espíritu humano, que ya en las condiciones terrenas parece anticipar aquello de lo que el hombre será partícipe en la resurrección futura"10. La virginidad y el celibato apostólico son aquí en la tierra un anticipo del Cielo.

A la vez, la doctrina cristiana ha afirmado siempre que "el sexo no es una realidad vergonzosa, sino una dádiva divina que se ordena limpiamente a la vida, al amor, a la fecundidad.

"Ese es el contexto, el trasfondo, en el que se sitúa la doctrina cristiana sobre la sexualidad. Nuestra fe no desconoce nada de lo bello, de lo generoso, de lo genuinamente humano, que hay aquí abajo"11. Quienes entregan a Dios por amor todo su ser, sin mediar un amor humano en el matrimonio, no lo hacen "por un supuesto valor negativo del matrimonio, sino en vista del valor particular que está vinculado a esta opción y que hay que descubrir y aceptar personalmente como vocación propia. Y por esto, Cristo dice: el que pueda entender, que entienda (Mt 19, 12)"12. El Señor ha dado a cada uno una misión aquí en la vida; su felicidad está en cumplirla acabadamente, con sacrificio y alegría.

III. La castidad vivida en el propio estado, en la especial vocación recibida de Dios, es una de las mayores riquezas de la Iglesia ante el mundo; nace del amor y al amor se ordena. Es un signo de Dios en la tierra. La continencia por el reino de los Cielos "lleva sobre todo la impronta de la semejanza con Cristo, que, en la obra de la redención, hizo Él mismo esta opción por el reino de los Cielos"13. Los Apóstoles, apartándose de la tradición de la Antigua Alianza donde la fecundidad procreadora era considerada como una bendición, siguieron el ejemplo de Cristo, convencidos de que así le seguían más de cerca y se disponían mejor para llevar a cabo la misión apostólica recibida. Poco a poco fueron comprendiendo –nos recuerda Juan Pablo II– cómo de esa continencia se origina una particular "fecundidad espiritual y sobrenatural del hombre que proviene del Espíritu Santo"14.

Quizá en el momento actual a muchos les puede resultar incomprensible la castidad, y mucho más el celibato apostólico y la virginidad vividas en medio del mundo. También los primeros cristianos tuvieron que enfrentarse a un ambiente hostil a esta virtud. Por eso, parte importante del apostolado que hemos de llevar a cabo es el de valorar la castidad y el cortejo de virtudes que la acompañan: hacerla atractiva con un comportamiento ejemplar, y dar la doctrina de siempre de la Iglesia sobre esta materia que abre las puertas a la amistad con Dios. Hemos de cuidar, por ejemplo, los detalles de pudor y de modestia en el vestir, en el aseo, en el deporte; la negativa tajante a participar en conversaciones que desdicen de un cristiano; el rechazo de espectáculos inmorales...; y sobre todo hemos de dar el ejemplo alegre de la propia vida. Con nuestra conversación hemos de poner de manifiesto, descaradamente cuando sea necesario, la belleza de esta virtud y los innumerables frutos que de ella se derivan: la mayor capacidad de amar, la generosidad, la alegría, la finura de alma... Hemos de proclamar a los cuatro vientos que esta virtud es posible siempre si se ponen los medios que Nuestra Madre la Iglesia ha recomendado durante siglos: el recogimiento de los sentidos, la prudencia atenta para evitar las ocasiones, la guarda del pudor, la moderación en las diversiones, la templanza, el recurso frecuente a la oración, a los sacramentos y a la penitencia, la recepción frecuente de la Sagrada Eucaristía, la sinceridad... y, sobre todo, un gran amor a la Virgen Santísima15. Nunca seremos tentados por encima de nuestras fuerzas16.

Al terminar nuestra oración acudimos a Santa María, Mater pulchrae dilectionis, Madre del amor hermoso, que nos ayudará siempre a sacar un amor más firme aun de las mayores tentaciones.

1 Lc 20, 27-40. — 2 Cfr. Dt 25, 5 ss. — 3 Santo Tomás, Comentario al Evangelio de San Mateo, 22, 30. — 4 Cfr. Catecismo Romano, III, 7, n. 6. — 5 San Josemaría Escrivá, Surco, n. 841. — 6 San Ambrosio, Tratado sobre las vírgenes, 1, 3. — 7 Cfr. San Josemaría Escrivá, Es Cristo que pasa, 5. — 8 J. M. Martínez Doral, La santidad de la vida conyugal, en Scripta Theologica, Pamplona 1989, vol. XXI, fasc. 3, pp. 880-881. — 9 Cfr. 1 Cor 7, 33. — 10 Juan Pablo II, Audiencia general 10-II-1982. — 11 San Josemaría Escrivá, Es Cristo que pasa, 24. — 12 Juan Pablo II, loc. cit. — 13 ídem, Audiencia general 24-III-1982. — 14 Ibídem. — 15 Cfr. S. C. para la Doctrina de la Fe, Declaración acerca de ciertas cuestiones de ética sexual, 29-XII-1975, 12. — 16 Cfr. 1 Cor, 10, 13.

___________________________________________________________________________________________

 

Santoral               (si GoogleGroups corta el texto, lo encontrará en www.iesvs.org)

 

Fuente: Centro de Espiritualidad Santa María
Andrés Dung-Lag y compañeros, Santos 117 Mártires vietnamitas de los siglos XVIII y XIX, Noviembre 24  

Andrés Dung-Lag y compañeros, Santos

Mártires de Vietnam

Esta memoria obligatoria de los ciento diecisiete mártires vietnamitas de los siglos XVIII y XIX, proclamados santos por Juan Pablo II en la plaza de San Pedro el 19 de junio de 1988, celebra a mártires que ya habían sido beatificados anteriormente en cuatro ocasiones distintas: sesenta y cuatro, en 1900, por León XIII; ocho, por Pío X, en 1906; veinte, en 1909, por el mismo Pío X; veinticinco, por Pío XII, en 1951.

No sólo son significativos el número insuperado en la historia de las canonizaciones, sino también la calificación de los santos (ocho obispos, cincuenta sacerdotes, cincuenta y nueve laicos), la nacionalidad (noventa y seis vietnamitas; once españoles; diez franceses, el estado religioso (once dominicos; diez de la Sociedad de las Misiones Extranjeras de París; otros del clero local, más un seminarista, el estado laical (muchos padres de familia, una madre, dieciséis catequistas, seis militares, cuatro médicos, un sastre; además de campesinos, pescadores y jefes de comunidades cristianas).

Seis de ellos fueron martirizados en el siglo XV, los demás, entre 1835 y 1862; es decir, en el tiempo del dominio de los tres señores que gobernaban Tonkín, Annam y Cochinchina, hoy integradas en la nación de Vietnam.

En gran parte (setenta y cinco) fueron decapitados; los restantes murieron estrangulados, quemados vivos, descuartizados, o fallecieron en prisión a causa de las torturas, negándose a pisotear la cruz de Cristo o a admitir la falsedad de su fe.

De estos ciento diecisiete mártires, la fórmula de canonización ha puesto de relieve seis nombres particulares, en representación de las distintas categorías eclesiales y de los diferentes orígenes nacionales. El primero, del que encontramos una carta en el oficio de lectura, es Andrés Dung-Lac. Nació en el norte de Vietnam en 1795; fue catequista y después sacerdote. Fue muerto en 1839 y beatificado en 1900. Otros dos provienen del centro y del sur del Vietnam. El primero, Tomás Tran-VanThien, nacido en 1820 y arrestado mientras iniciaba su formación sacerdotal, fue asesinado a los dieciocho años en 1838; el otro es Manuel Le-Van-Phung, catequista y padre de familia, muerto en 1859 (beatificado en 1909).

Entre los misioneros extranjeros son mencionados dos españoles y un francés. El dominico español Jerónimo Hermosilla, llegado a Vietnam en 1829, vicario apostólico del Tonkín oriental, fue muerto en 1861 (beatificado en 1909); el otro dominico, el obispo vasco Valentín de Berriochoa, que llegó a Tonkín en 1858, a los treinta y cuatro años, fue muerto en 1861 (beatificado en 1906).

El francés Jean-Théophane Vénard, de la Sociedad de las Misiones Extranjeras de París, llegó a Tonkín en 1854 y fue asesinado a los treinta y dos años (beatificado en 1906): sus cartas inspiraron a santa Teresa de Lisieux a rezar por las misiones, de las que fue proclamada patrona junto con san Francisco Javier.

LISTA DE LOS 117 MÁRTIRES DE VIETNAM



1 Andrés DUNG-LAC, Sacerdote 21-12-1839
2
Domingo HENARES, Obispo O.P. 25-06-1838
3 Clemente Ignacio DELGADO CEBRIAN, Obispo O.P. 12-07-1838
4 Pedro Dumoulin BORIE, Obispo M.E.P. 24-11-1838
5 José María DIAZ SANJURJO, Obispo O.P. 20-07-1857
6
Melchor GARCIA SAMPEDRO SUAREZ, Obispo O.P. 28-07-1858
7 Jerónimo HERMOSILLA, Obispo O.P. O1-11-1861
8 Valentín BERRIOCHOA, Obispo O.P. 01-11-1861
9 Esteban Teodoro CUENOT, Obispo M.E.P. 14-11-1861
10 Francisco GIL DE FEDERICH, Sacerdote O.P. 22-O1-1745
11 Mateo ALONSO LECINIANA, Sacerdote O.P. 22-O1-1745
12 Jacinto CASTANEDA, Sacerdote O.P. 07-11-1773
13 Vicente LE OUANG LIEM, Sacerdote O.P. 07-11-1773
14 Emanuel NGUYEN VAN TRIEU, Sacerdote 17-09-1798
15 Juan DAT, Sacerdote 28-10-1798
16 Pedro LE TuY, Sacerdote 11-10-1833
17 Francisco Isidoro GAGELIN, Sacerdote M.E.P. 17-10-1833
18 José MARCHAND, Sacerdote M.E.P. 30-11-1835
19 Juan Carlos CORNAY, Sacerdote M.E.P. 20-09-1837
20 Vicente DO YEN, Sacerdote O.P. 30-06-1838
21 Pedro NGUYEN BA TUAN, Sacerdote 15-07-1838
22 José FERNANDEZ, Sacerdote O.P. 24-07-1838
23 Bernardo VU VAN DUE, Sacerdote 01-08-1838
24 Domingo NGUYEN VAN HANH (DIEU), Sacerdote O.P. 01-08-1838
25 Santiago Do MAI NAM, Sacerdote 12-08-1838
26 José DANG DINH (NIEN) VIEN, Sacerdote 21-08-1838
27 Pedro NGUYEN VAN TU, Sacerdote O.P. 05-09-1838
28 Francisco JACCARD, Sacerdote M.E.P. 21-09-1838
29 Vicente NGUYEN THE DIEM, Sacerdote 24-11-1838
30 Pedro VO BANG KHOA, Sacerdote 24-11-1838
31 Domingo TUOC, Sacerdote O.P. 02-04-1839
32 Tomás DINH VIET Du, Sacerdote O.P. 26-11-1839
33 Domingo NGUYEN VAN (DOAN) XUYEN, Sacerdote O.P. 26-11-1839
34 Pedro PHAM VAN TIZI, Sacerdote 21-12-1839
35 Pablo PHAN KHAc KHOAN, Sacerdote 28-04-1840
36 Josée DO QUANG HIEN, Sacerdote O.P. 09-05-1840
37 Lucas Vu BA LOAN, Sacerdote 05-06-1840
38 Domingo TRACH (DOAI), Sacerdote O.P. 18-09-1840
39 Pablo NGUYEN NGAN, Sacerdote 08-11-1840
40 José NGUYEN DINH NGHI, Sacerdote 08-11-1840
41 Martín TA Duc THINH, Sacerdote 08-11-1840
42 Pedro KHANH, Sacerdote 12-07-1842
43
Agustín SCHOEFFLER, Sacerdote M.E.P. 01-05-1851
44
Juan Luis BONNARD, Sacerdote M.E.P. 01-05-1852
45 Felipe PHAN VAN MINH, Sacerdote 03-07-1853
46 Lorenzo NGUYEN VAN HUONG, Sacerdote 27-04-1856
47 Pablo LE BAo TINH, Sacerdote 06-04-1857
48 Domingo MAU, Sacerdote O.P. 05-11-1858
49 Pablo LE VAN Loc, Sacerdote 13-02-1859
50 Domingo CAM, Sacerdote T.O.P. 11-03-1859
51 Pedro DOAN LONG QUY, Sacerdote 31-07-1859
52 Pedro Francisco NERON, Sacerdote M.E.P. 03-11-1860
53 Tomás KHUONG, Sacerdote T.O.P. 30-01-1861
54 Juan Teofano VENARD, Sacerdote M.E.P. 02-02-1861
55 Pedro NGUYEN VAN Luu, Sacerdote 07-04-1861
56 José TUAN, Sacerdote O.P. 30-04-1861
57 Juan DOAN TRINH HOAN, Sacerdote 26-05-1861
58 Pedro ALMATO RIBERA, Sacerdote O.P. 01-11-1861
59 Pablo TONG VIET BUONG, Laico 23-10-1833
60 Andrés TRAN VAN THONG, Laico 28-11-1835
61 Francisco Javier CAN, Catequista 20-11-1837
62
Francisco DO VAN (HIEN MINH) CHIEU, Catequista 25-06-1838
63 José NGUYEN DINH UPEN, Catequista T.O.P. 03-07-1838
64 Pedro NGUYEN DicH, Laico 12-08-1838
65 Miguel NGUYEN HUY MY, Laico 12-08-1838
66 José HOANG LUONG CANH, Laico T.O.P. 05-09-1838
67 Tomás TRAN VAN THIEN, Seminarista 21-09-1838
68 Pedro TRUONG VAN DUONG, Catequista 18-12-1838
69 Pablo NGUYEN VAN MY, Catequista 18-12-1838
70 Pedro VU VAN TRUAT, Catequista 18-12-1838
71 Agustín PHAN VIET Huy, Laico 13-06-1839
72 Nicolás BUI DUC THE, Laico 13-06-1839
73 Domingo (Nicolás) DINH DAT, Laico 18-07-1839
74 Tomás NGUYEN VAN DE, Laico T.O.P. 19-12-1839
75 Francisco Javier HA THONG MAU, Catequista T.O.P. 19-12-1839
76 Agustín NGUYEN VAN MOI, Laico T.O.P. 19-12-1839
77 Domingo Bui VAN UY, Catequista T.O.P. 19-12-1839
78 Esteban NGUYEN VAN VINTI, Laico T.O.P. 19-12-1839
79 Pedro NGUYEN VAN HIEU, Catequista 28-04-1840
80 Juan Bautista DINH VAN THANH, Catequista 28-04-1840
81 Antonio NGUYEN HUU (NAM) QUYNH, Laico 10-07-1840
82 Pietro NGUYEN KHAC Tu, Catequista 10-07-1840
83 Tomás TOAN, Catequista T.O.P. 21-07-1840
84 Juan Bautista CON, Laico 08-11-1840
85 Martín THO, Laico 08-11-1840
86 Simón PHAN DAc HOA, Laico 12-12-1840
87 Inés LE THi THANH (DE), Laica 12-07-1841
88 Mateo LE VAN GAM, Laico 11-05-1847
89 José NGUYEN VAN Luu, Catequista 02-05-1854
90 Andrés NGUYEN Kim THONG (NAM THUONG), Catequista 15-07-1855
91 Miguel Ho DINH HY, Laico 22-05-1857
92 Pedro DOAN VAN VAN, Catequista 25-05-1857
93 Francisco PHAN VAN TRUNG, Laico 06-10-1858
94 Domingo PHAM THONG (AN) KHAM, Laico T.O.P. 13-01-1859
95 Lucas PHAM THONG (CAI) THIN, Laico 13-01-1859
96 José PHAM THONG (CAI) TA, Laico 13-01-1859
97 Pablo HANH, Laico 28-05-1859
98 Emanuel LE VAN PHUNG, Laico 31-07-1859
99 José LE DANG THI, Laico 24-10-1860
100 Mateo NGUYEN VAN (NGUYEN) PHUONG, Laico 26-05-1861
101 José NGUYEN DUY KHANG, Catequista T.O.P. 06-11-1861
102 José TUAN, Laico 07-01-1862
103 José TUC, Laico 01-06-1862
104 Domingo NINH, Laico 02-06-1862
105 Domingo TORI, Laico 05-06-1862
106 Lorenzo NGON, Laico 22-05-1862
107 Pallo (DONG) DUONG, Laico 03-06-1862
108 Domingo HUYEN, Laico 05-06-1862
109 Pedro DUNG, Laico 06-06-1862
110 Vicente DUONG, Laico 06-06-1862
111 Pedro THUAN, Laico 06-06-1862
112 Domingo MAO, Laico 16-06-1862
113 Domingo NGUYEN, Laico 16-06-1862
114 Domingo NHI, Laico 16-06-1862
115 Andrés TUONG, Laico 16-06-1862
116 Vicente TUONG, Laico 16-06-1862
117 Pedro DA, Laico 17-06-1862

_______________________

O.P. : Orden de los Predicadores (Dominicos)
T.O.P.: Terciario de la Orden de los Predicadores
M.E.P.: Sociedad de las Misiones Extranjeras de París

___________________________________________________________________________________________

Fuente: Archidiócesis de Madrid
Flora y María, Santas Mártires, Noviembre 24  

Flora y María, Santas

Virgenes y Mártires

Martirologio Romano: En Córdoba, en la región hispánica de Andalucía, santas Flora y María, vírgenes y mártires, que en la persecución llevada a cabo por los musulmanes fueron encarceladas con san Eulogio y después muertas a espada (856).

Etimología: Flora = Aquella que es una bella doncella adornada con una flor, es de origien latino.

María = Aquella que es excelsa - la amada por Dios, es de origen hebreo.


Los martirologios de Adón, Usuardo, Maurolico, del obispo Equilino y el Romano hacen memoria de estas dos vírgenes mártires de Córdoba lo que hace pensar en la repercusión que debió tener el doble martirio en toda la España del siglo IX y explicar la rápida difusión de su culto.

Flora es hija de madre cristiana y padre musulmán. Fue educada por su madre desde pequeña en el amor a Jesucristo y aprendió de sus labios el valor relativo de las cosas de este mundo. Tiene un hermano —musulmán fanático— que la denuncia como cristiana en la presencia del cadí. Allí es azotada cruelmente para hacerla renegar, pero se mantiene firme en la fe. El cadí la pone bajo la custodia de su hermano que ahora tiene el encargo de la autoridad para hacerla cambiar de actitud. Soporta todas las vejaciones y ultrajes a que la somete su hermano siempre con la intención de pervertirla.

María es hija de cristianos que han puesto a su hijo Walabonso bajo la custodia de un sacerdote con el encargo de educarlo en un monasterio; mientras ella entra en el cenobio de Cuteclara. Muerto mártir su hermano, se dirige ahora a la iglesia de san Acisclo después de haber tomado una firme resolución.

Las dos jóvenes coinciden a los pies de san Acisclo. El saludo de la paz les ha facilitado abrirse mutuamente las almas y se encuentran en comunión de sentimientos, deseos y resoluciones. Se juran amistad para siempre, una caridad que dura hasta el Cielo.

Se encaminan con valentía al palacio del cadí y hacen ante él pública profesión de fe cristiana.

Encarceladas junto con prostitutas y gente de mal vivir, son condenadas por los jueces a morir decapitadas, no sin el consuelo, ánimo y bendición de san Eulogio que las conoció. Hecha la señal de la cruz, primero será la cabeza de Flora la cortada por el alfanje, después rueda la de María. Sus cuerpos quedan expuestos, para disuasión de cristianos y demostración de poder musulmán, a las aves y los perros. Al día siguiente los arrojaron al Guadalquivir.

Sus cabezas se depositaron en la iglesia de san Acisclo.

___________________________________________________________________________________________

Pedro Dumoulin-Borie y compañeros, Santos Sacerdotes y Mártires, Noviembre 24  

Pedro Dumoulin-Borie y compañeros, Santos

Sacerdotes y Mártires

Martirologio Romnao: En la ciudad de Dông Hoy, en Annam, santos mártires Pedro Dumoulin- Borie, obispo de la Sociedad de Misiones Extranjeras de París, Pedro Vo Dang Khoa y Vicente Ngyen Tho Diem, presbíteros, de los cuales, por orden del emperador Minh Mang, el primero fue degollado y los demás estrangulados (1838).

Este joven, amante de la misiones, nació el 20 de febrero de 1808 en Beynat de Corrèze.

Sus padres eran reacios ante cualquiera de las decisiones de su hijo. Le dijeron en su cara que no sería ni misionero, ni de la Trapa, ni médico.

No podía salir de Francia. Lo querían cerca de sí mismos. Egoísmo de padres.

Todo lo más que le consentían, era que fuese cura pero sin salir del país.

Siguiendo los consejos de los padres, entró un buen día en el seminario mayor de Tulle. El, sin embargo, tenía las ideas muy claras acerca de su vida futura:"Seguiré mi vocación por donde quiera que me llaman, aunque sea en las misione extranjeras".

Con el paso del tiempo, la ocasión se le presentó propicia en octubre de 1829.

Durante el tiempo de los motines y revueltas en París, le dieron una paliza de muy señor mío porque lo tomaron por un suizo. En esta ocasión Dios lo libró del peligro porque su acento era típicamente francés.

Llegó al sacerdocio el 21 de noviembre de 1830. Sin tener la menor duda, se embarcó en el norte de Francia, en el puerto Le Havre con destino a Mónaco .

Era el 18 de julio de 1831. De aquí continuó su rumbo hacia tierras lejanas del Oriente. Desembarcó en Saigón porque unos contrabandistas chinos atacaron el barco.

En este país se desencadenó una revolución persecutoria. El, con toda la fuerza interior que llevaba en su espíritu, comenzó a evangelizar la región que se le había confiado.

Entre tanto lío, lo arrestaron las hordas enemigas en 1838. Y es curioso que estando en la misma cárcel, recibió el encargo de nombramiento de obispo.

El mismo verdugo que debía darle muerte, no quería. Pero tuvo que hacerlo recurriendo para ello a la borrachera.

Sus restos se conservan en la Sala de los mártires del Seminario de las Misiones Extranjeras de París.

Para ver más sobre los 117 mártires en Vietnam haz "click"
AQUI

___________________________________________________________________________________________

Bálsamo de Cava, Beato Abad, Noviembre 24  

Bálsamo de Cava, Beato

Abad

Martirologio Romano: En el monasterio de Cava, en la Campania, beato Balsamo, abad, que en medio de las turbulencias y contradicciones de su tiempo desempeñó su cargo con sabiduría y prudencia (1232).

Etimología: Bálsamo = aquel de alma perfumada. Viene de la lengua latina.


Fue un abad del siglo XIII. La historia de la abadía de la Trinidad de Cava, junto a Salerno, fue fundada cerca del año mil.

La historia de sus abades es muy interesante para los historiadores y gente dedicada al estudio y a la investigación.

Esto se debe al mantenimiento perfecto de sus bibliotecas que contienen nada menos que mil años de historia.

Bálsamo fue un abad de ese monasterio que encierra una serie de hombres impresionantes para hoy y siempre.

Se sabe que la abadía de Cava tuvo una gran influencia e importancia en toda la Edad Media por la capacidad de trabajo de sus monjes y por su alto grado de santidad.

El fue uno de los más ilustres.

Dirigió el monasterio con suma maestría, con sabiduría y con un trato exquisito a los hermanos.
Estuvo en ella 25 años: desde el 1208 a 1232, el año de su muerte.

Era un hombre de letras. Por eso, se había ganado la amistad de los Papas y de los mismos emperadores.

Federico II lo llamaba cariñosamente "el martillo del mundo".

Este emperador favoreció mucho este monasterio y le dio al abad la potestad de juzgar a quienes atentasen contra la abadía.

___________________________________________________________________________________________

Fermina (Firmina) de Amelia, Santa Mártir, Noviembre 24  

Fermina (Firmina) de Amelia, Santa

Mártir

Maritrologio Romano: En Amelia, ciudad de la Umbría, santa Firmina, mártir (303).

Etimología: Firmina = firme. Viene de la lengua latina.


Fermina fue una mártir en el siglo III.

Cuando hay falta de muchos datos históricos serios, existen, por el contrario, muchas leyendas acerca de la vida de algunos santos.

Según la narraciones tradicionales, Fermina era romana, y vivió en el siglo III.

Debió nacer en el seno de una familia llamada Pisoni.

Su padre era el gobernador de la ciudad, y su madre una cristiana llena del amor a Dios y al prójimo.

La joven debía tener 16 años cuando estalló la persecución en Roma, la siempre y traída persecución de Diocleciano.

Viendo el peligro que se avecinaba, salió de la ciudad, pero antes vendió todas sus cosas – con gran alegría desprendimiento – y se las entregó a los pobres.

Para llegar a la nueva región de la Umbría italiana, tuvo que embarcarse en una nave en el Tíber de Civitavecchia.

Como vio muchas necesidades entre los cristianos que eran dura y cruelmente perseguidos, se quedó con ellos para ayudarles en todo aquello que fuera necesario.

Cuando llegó a Amelia, se entregó a una vida de oración y de penitencia.

Su felicidad iba a durar poco tiempo. Descubierta por las autoridades, la llevaron a los tribunales. Y juzgada de mala manera, fue condenada a muerte, En Amelia se conserva su memoria.

___________________________________________________________________________________________

Fuente: Marcelline.org
María Ana Sala, Beata Virgen Marcelina, 24 Noviembre  

María Ana Sala, Beata

Nació en Brivio (pueblo italiano de la provincia de Lecco) el 21 de abril de 1829.

Fue una de las primeras alumnas de la naciente escuela de las Hermanas Marcelinas en el pueblo de Vimercate.

Fue acogida por la Madre Marina Videmari, rápidamente se distinguió por lo ejemplar de su vida y por su aprovechamiento escolar.

En 1848, entró a formar parte de de la nueva Congregación, comprendió de inmediato que su ideal y su misión tendrían que ser en la enseñanza , la educación, la formación de las jóvenes en la escuela y en la familia.

Sor María Ana se santificó en la sencillez por su total fidelidad al Carisma de la congregación que había elegido. De su vida y ejemplo, surgen tres enseñanzas: la necesidad de la formación de un buen carácter firme, sensible, equilibrado; el valor santificador del compromiso en el propio deber, asignado por la obediencia y la importancia esencial de la obra educativa.

Su pedagogía fue la que su director espiritual, Monseñor Luis Biraghi, le recomendó: estar cercana, estar junto a las jóvenes en cada momento y circunstancia, participando de su vida cotidiana, en clases, en la capilla, en el comedor, en la recreación, en el dormitorio.

Entre sus mejores alumnas, se recuerda a la jóven Judith Alghisi Montini, la que después sería mamá del futuro papa Paulo VI.

Maria Ana Murió santamente el 24 de noviembre de 1891.

Fue beatificada por Juan Pablo II en 1980.

___________________________________________________________________________________________

Fuente: Martirologio Romano
Otros Santos y Beatos Completando el santoral de éste día, 24 de noviembre  

Otros Santos y Beatos

San Crisógono, mártir

En Aquileya, en el territorio de Venecia, conmemoración de san Crisógono, mártir, a quien se da culto en Roma el día del aniversario de la dedicación de la iglesia cuyo título lleva su nombre (304).

San Romano, presbítero

En el lugar de Blaye, en el territorio de Burdeos, en Aquitania, san Romano, presbítero (385).

San Colmano, obispo

En Cluain Uama (hoy Clyne), de Hibernia (hoy Irlanda), san Colmano, obispo (600).

Beatas Nicetas de santa Prudencia Plaja Xifra y compañeras, religiosas mártires

En Picadero de Paterna, en el territorio de Valencia, en España, beatas Nicetas de santa Prudencia Plaja Xifra y compañeras, vírgenes del Instituto de las Hermanas Carmelitas de la Caridad y mártires, todas las cuales fueron consideradas dignas de entrar con Cristo Esposo en el convite eterno, llevando sus lámparas encendidas (1936). Sus nombres son: beatas Paula de Santa Anastasia Isla Alonso, Antonia de Santo Timoteo Gosens Sáez de Ibarra, Daría de Santa Sofía Campillo Paniagua, Erundina de Nuestra Señora del Monte Carmelo Colino Vega, Consolada del Santísimo Sacramento Cuñado González, Concepción de San Ignacio Odriozola Zabalía, Feliciana de Nuestra Señora del Monte Carmelo de Uribe Orbe, Concepción de Santa Magdalena Rodríguez Fernández, Justa de María Inmaculada Maiza Goicoechea, Clara de Nuestra Señora de la Esperanza Urrutia y Cándida de Nuestra Señora de los Ángeles Cayuso González.

San Protasio, obispo

En Milán, de la provincia de Liguria, san Protasio, obispo, que defendió ante el emperador Constante la causa de san Atanasio y tomó parte en el Concilio de Sárdica (352).

___________________________________________________________________________________________

 

Fuentes: IESVS.org; EWTN.com; Colección Hablar con Dios de www.FranciscoFCarvajal.org de www.edicionespalabra.es , misalpalm.com, Catholic.net

 

Mensajes anteriores en: http://iesvs-org.blogspot.com/

 

Si NO desea el evangelio, santoral y meditación diaria y sólo artículos interesantes censurados por la prensa (la mayoría), unos 4 por semana escriba a: ave-maria-purisima+subscribe@googlegroups.com (responder el mensaje de confirmación).

 

Para de-suscribirse escribir desde su casilla de email a:

Evangelio+unsubscribe@googlegroups.com

NO debe colocarlo en CC sino en "Para/To"

Si no se desuscribe es porque recibe el mensaje en su otro email que le reenvía al actual: debe escribir desde ese otro email.