JMJ
Pax
Tú eres el Mesías de Dios. Es necesario que el Hijo del hombre sufra mucho
† Lectura del santo Evangelio según san Lucas 9, 18-22
Gloria a ti, Señor.
Un día en que Jesús, acompañado de sus discípulos, había ido a un lugar solitario para orar, les preguntó:
"¿Quién dice la gente que soy yo?"
Ellos contestaron:
"Unos dicen que Juan el Bautista, otros que Elías, otros que alguno de los antiguos profetas, que ha resucitado".
El les preguntó:
"Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?"
Respondió Pedro:
"El Mesías de Dios".
Entonces Jesús les prohibió severamente decírselo a nadie. Después les dijo:
"Es necesario que el Hijo del hombre sufra mucho, sea rechazado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, sea entregado a la muerte y resucite al tercer día".
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Suplicamos tu oración: Esto es gratis pero cuesta. No sería posible sin tus oraciones: al menos un Avemaría de corazón por cada email que leas. Dios te salve María, llena eres de Gracia, el Señor es contigo; bendita tu eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús; Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. ¡Recuérdanos en tus intenciones de Misa!
Aclaración: una relación muere sin comunicación y comunidad-comunión. Con Dios es igual: las "palabras de vida eterna" (Jn 6,68; Hc 7,37) son fuente de vida espiritual (Jn 6, 63), pero no basta charlar por teléfono (oración), es necesario visitarse, y la Misa permite ver a Jesús, que está tan presente en la Eucaristía, que Hostias han sangrado: www.therealpresence.org/eucharst/mir/span_mir.htm
Por leer la Palabra, no se debe dejar de ir a Misa, donde ofrecemos TODO (Dios) a Dios: al actualizarse el sacrificio de la Cruz, a) co-reparamos el daño que hacen nuestros pecados al Cuerpo de Cristo que incluye los Corazones de Jesús y de María, a Su Iglesia y nosotros mismos, b) adoramos, c) agradecemos y d) pedimos y obtenemos Gracias por nuestras necesidades y para la salvación del mundo entero… ¿Que pasa en CADA Misa? 5 minutos: http://www.youtube.com/watch?v=v82JVdXAUUs
Nota: es una película protestante, por eso falta LA MADRE.
El Misterio de la Misa en 2 minutos: https://www.youtube.com/watch?v=0QCx-5Aqyrk
El que no valora una obra de arte es porque necesita cultura: https://www.youtube.com/watch?v=mTKKaT-KaKw
Lo que no ven tus ojos (2 minutos): http://www.gloria.tv/media/y3hgYNp23xu
El Gran Milagro (película completa): http://www.gloria.tv/media/hYyhhps7cqX
Explicación: http://www.youtube.com/watch?v=eFObozxcTUg#!
San Leonardo, "El GRAN tesoro oculto de la Santa Misa": http://iteadjmj.com/LIBROSW/lpm1.doc
Audio (1/5): https://www.youtube.com/watch?v=2NjKuVnxH58
Si Jesús se apareciera, ¿no correríamos a verlo, tocarlo, adorarlo? Jesús está aquí y lo ignoramos. Jesús nos espera (Mc 14,22-24) en la Eucaristía: "si no coméis la carne del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros" (Jn 6,53; 1 Jn 5,12). La Misa es lo mínimo para salvarnos. Es como si un padre dijera "si no comes, te mueres, así que come al menos una vez por semana". Si comulgamos en estado de Gracia y con amor, nos hacemos uno (común-unión) con el Amor y renovamos la Nueva Alianza de Amor. Si faltamos a las bodas del Cordero (Ap.19,7-10) con su Iglesia (nosotros), sabiendo que rechazamos el Amor de Dios, que está derramando toda su Sangre por nuestros pecados personales, nos auto-condenamos a estar eternamente sin Amor: si una novia falta a su boda, es ella la que se aparta del amor del Novio para siempre, sabiendo que Él da la Vida por ella en el altar. ¿Qué pensaríamos si un cónyuge le dice al otro: "Te amo, pero no quiero verte todos los días, y menos los de descanso"? ¿Le ama realmente?
Faltar a Misa viola los principales mandamientos: el primero ("Amar a Dios sobre todas las cosas") y tercero ("Santificar las fiestas"). Por nuestro propio bien y evitar el infierno eterno, Dios sólo nos pide que nos regalemos 1 de las 168 horas de vida que Él nos regala cada semana: 0,6% ¡No seamos ingratos! Idolatramos aquello que preferimos a Él: los "dioses" son el descanso, entretenimiento, comida, trabajo, compañía, flojera. Prefieren baratijas al oro. Si en la Misa repartieran 1 millón de dólares a cada uno, ¿qué no harías para asistir? ¡Pues recibes infinitamente más! "Una misa vale más que todos los tesoros del mundo"… Por todo esto, es pecado mortal faltar sin causa grave a la Misa dominical y fiestas (Catecismo 2181; Mt 16, 18-19; Ex 20,8-10; Tb 1,6; Hch 20,7; 2 Ts 2,15).
Si rechazamos la Misa, ¿cómo vamos a decir "Padre Nuestro" si rechazamos volver a la Casa del Padre? ¿cómo decir "Santificado sea Tu Nombre", "Venga a nosotros Tu Reino", "Hágase Tu Voluntad", "Danos hoy nuestro pan supersubstancial de cada día" y "no nos dejes caer en la tentación más líbranos del malo", si todo eso lo obtenemos de la Misa?
Estamos en el mundo para ser felices para siempre, santos. Para lograr la santidad, la perfección del amor, es imprescindible la Misa y comunión, si es posible, diaria, como pide la Cátedra de Pedro, el representante de Cristo en la tierra (Canon 904). Antes de comulgar debemos confesar todos los pecados mortales: "quien come y bebe sin discernir el Cuerpo, come y bebe su propia condenación" (1 Cor 11,29; Rm 14,23). ¿Otros pecados mortales? no confesarse con el Sacerdote al menos una vez al año (CDC 989), no comulgar al menos en tiempo pascual (920), abortar (todos los métodos anticonceptivos no barrera son abortivos), promover el aborto (derecho a decidir, derechos (i)reproductivos, fecundación artificial), planificación natural sin causa grave, deseo o actividad sexual fuera del matrimonio por iglesia, privar de Misa a niños en uso de razón, borrachera, drogas, comer a reventar, envidia, calumnia, odio o deseo de venganza, ver pornografía, robo importante, chiste o burla de lo sagrado… ver más en http://www.iesvs.org/p/blog-page.html
Si no ponemos los medios para confesamos lo antes posible y nos sorprende la muerte sin arrepentirnos, nos auto-condenamos al infierno eterno (Catecismo 1033-41; Mt. 5,22; 10, 28; 13,41-50; 25, 31-46; Mc 9,43-48, etc.). Estos son pecados mortales objetivamente, pero subjetivamente, pueden ser menos graves, si hay atenuantes como la ignorancia. Pero ahora que lo sabes, ya no hay excusa (Jn 15,22).
† Misal
vie 25a. Ordinario año Par
Antífona de Entrada
Yo te invoco porque tú me respondes, Dios mío; atiéndeme y escucha mis palabras. Cuídame como a las niñas de tus ojos, cúbreme bajo la sombra de tus alas.
Oración Colecta
Oremos:
Dios todopoderoso y eterno, haz que nuestra voluntad sea siempre dócil a la tuya y que te sirvamos con un corazón sincero.
Por nuestro Señor Jesucristo....
Amén.
Primera Lectura
Todas las tareas tienen su momento
Lectura del libro del Eclesiastés 3, 1-11
Hay un tiempo para cada tarea, y todo lo que hacemos bajo el sol tiene su tiempo:
Tiempo de nacer, tiempo de morir; tiempo de plantar, tiempo de arrancar; tiempo de matar, tiempo de curar; tiempo de destruir, tiempo de construir; tiempo de llorar, tiempo de reír; tiempo de gemir, tiempo de bailar; tiempo de lanzar piedras, tiempo de recogerlas; tiempo de abrazarse, tiempo de separarse; tiempo de ganar, tiempo de perder; tiempo de guardar, tiempo de desechar; tiempo de rasgar, tiempo de coser; tiempo de callar, tiempo de hablar; tiempo de amar, tiempo de odiar; tiempo de guerra, tiempo de paz.
¿Qué provecho saca de su trabajo el que se esfuerza? He observado las tareas que Dios ha encomendado a los hombres, para que en ellas se ocupen.
Todo lo ha hecho Dios a su debido tiempo y le ha dado el mundo al hombre para que reflexione sobre él; pero el hombre no puede abarcar las obras de Dios del principio hasta el fin.
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
Salmo Responsorial
Del salmo 143
Bendito sea el Señor, mi fortaleza.
Bendito sea el Señor, mi fortaleza, mi roca firme; él adiestró mis manos y mis dedos para la lucha.
Bendito sea el Señor, mi fortaleza.
El es mi amigo fiel, mi fortaleza, mi seguro escondite, escudo en que me amparo, el que los pueblos a mis plantas rinde.
Bendito sea el Señor, mi fortaleza.
Señor, ¿qué es el hombre para que en él te fijes? ¿Qué hay en él de valor para que así lo estimes? El hombre es como un soplo; sus días, como sombra que se extingue.
Bendito sea el Señor, mi fortaleza.
Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Jesucristo vino a servir y a dar su vida por la salvación de todos.
Aleluya.
Evangelio
Tú eres el Mesías de Dios. Es necesario que el Hijo del hombre sufra mucho
† Lectura del santo Evangelio según san Lucas 9, 18-22
Gloria a ti, Señor.
Un día en que Jesús, acompañado de sus discípulos, había ido a un lugar solitario para orar, les preguntó:
"¿Quién dice la gente que soy yo?"
Ellos contestaron:
"Unos dicen que Juan el Bautista, otros que Elías, otros que alguno de los antiguos profetas, que ha resucitado".
El les preguntó:
"Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?"
Respondió Pedro:
"El Mesías de Dios".
Entonces Jesús les prohibió severamente decírselo a nadie. Después les dijo:
"Es necesario que el Hijo del hombre sufra mucho, sea rechazado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, sea entregado a la muerte y resucite al tercer día".
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Oración sobre las Ofrendas
Santifica, Señor, estos dones tuyos que con sincera voluntad te presentamos, y por medio de esta Eucaristía dígnate purificarnos y renovarnos.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.
Prefacio
Restauración universal en Cristo
Es justo y necesario.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación, darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, por Cristo, Señor nuestro.
A quien hiciste fundamento de todo y de cuya plenitud quisiste que participáramos todos.
El cual, siendo Dios, se anonadó a sí mismo, y por su sangre derramada en la cruz puso en paz todas las cosas; y así, constituido Señor del universo, es fuente de salvación eterna para cuantos creen en él.
Por eso,
con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Antífona de la Comunión
Los ojos del Señor están puestos en sus hijos, en los que esperan en su misericordia, para librarlos de la muerte y reanimarlos en tiempo de hambre.
Oración después de la Comunión
Oremos:
Que esta celebración eucarística nos comunique, Señor, nuevas fuerzas para cumplir tu voluntad en esta vida y nos confirme en la esperanza de tu Reino.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén
___________________________________________________________________________________________
Dia 23/09 San Pío de Pietrelcina, Presbítero, blanco)
Antífona de Entrada
San Pío ha recibido la bendición del Señor, ha encontrado gracia delante de Dios, su salvador, porque buscó sinceramente al Señor.
Oración Colecta
Oremos:
Dios todopoderoso y eterno, que diste a san Pío, presbítero, la gracia de participar singularmente de la cruz de tu Hijo y, por su ministerio, renovaste los prodigios de tu misericordia, concédenos por su intercesión que, asociados continuamente a los sufrimientos de Cristo, lleguemos felizmente a la gloria de la resurrección.
Por nuestro Señor Jesucristo...
Amén.
Antífona de la Comunión
Prueben y vean qué bueno es el Señor. Dichoso el hombre que se acoge a él.
Oración después de la Comunión
Oremos:
Señor, con la luz y la fuerza de este sacramento que hemos recibido, condúcenos siempre por el camino de tu amor, a fin de que la obra de salvación que has iniciado en nosotros, se vea coronada el día de la venida gloriosa de tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Amén
__________________________________________________________________________________________
† Meditación diaria
25ª semana. Viernes
EL TIEMPO Y EL MOMENTO
— Vivir el momento presente,
— Realizar con plena atención las tareas que tenemos entre manos.
— Evitar preocupaciones inútiles.
I. Muchas son las tareas que hemos de realizar para presentarnos ante nuestro Padre Dios con las manos llenas de fruto. La Sagrada Escritura nos enseña, en una de las lecturas para la Misa de hoy, que todo tiene su tiempo y su momento. Las circunstancias y acontecimientos de la vida forman parte de un plan divino. Pero hay veces en las que el hombre no acierta a comprender ese querer de Dios sobre sus criaturas y no encuentra el tiempo oportuno para cada cosa. Con frecuencia los hombres ponen su interés lejos de la labor que tienen entre manos: el padre puede vivir ajeno a los hijos cuando, además de estar físicamente presentes, requerían una mayor atención a sus problemas, a sus motivos de alegría o de preocupación; el estudiante en ocasiones tiene la imaginación fuera de la asignatura que ha de aprobar y desaprovecha un tiempo que luego echará de menos, quizá con preocupación y angustia. "El tiempo es precioso, el tiempo pasa, el tiempo es una fase experimental de nuestra suerte decisiva y definitiva. De las pruebas que damos de fidelidad a los propios deberes depende nuestra suerte futura y eterna.
"El tiempo es un don de Dios: es una interpelación del amor de Dios a nuestra libre y –puede decirse– decisiva respuesta. Debemos ser avaros del tiempo, para emplearlo bien, con la intensidad en el obrar, amar y sufrir. Que no exista jamás para el cristiano el ocio, el aburrimiento. El descanso sí, cuando sea necesario (cfr. Mc 6, 31), pero siempre con vistas a una vigilancia que solo en el último día se abrirá a una luz sin ocaso"1.
Una de las lecturas de la Misa nos invita a aprovechar la vida de cara a Dios, estando atentos al momento presente, el único del que verdaderamente podemos disponer. Cada tarea tiene su tiempo: Tiempo de nacer y tiempo de morir, tiempo de plantar y tiempo de arrancar lo plantado... tiempo de construir y tiempo de derribar, tiempo de llorar y tiempo de reír... tiempo de hablar y tiempo de callar...2. Perder el tiempo es dedicarlo a otras tareas, quizá humanamente interesantes y productivas, pero distintas de las que Dios esperaba que atendiéramos en ese momento preciso: dedicar al trabajo o a los amigos unas horas que se debían emplear en el hogar, leer el periódico cuando el quehacer profesional pedía estar metidos de lleno en la tarea o en la vida de familia... Ganarlo es hacer lo que Dios quiere que llevemos a cabo: vivir el momento presente sabiendo que la vida del hombre se compone de continuos presentes, los únicos que podemos santificar. Del pasado solo debemos sacar motivos de contrición por todo aquello que hicimos mal, de acciones de gracias por las ayudas que recibimos del Señor, y experiencia para llevar a cabo con más perfección nuestras tareas.
Los sucesos del futuro no nos deben preocupar demasiado, pues todavía no tenemos la gracia de Dios para enfrentarnos a ellos. "Vivir plenamente el momento presente es el pequeño secreto con el cual se construye, ladrillo a ladrillo, la ciudad de Dios en nosotros"3. No poseemos otro tiempo que el actual. Este es el único que, sean cuales sean las circunstancias que nos acompañen, podemos y debemos santificar. Hoy y ahora, este momento, vivido con intensidad, con amor, es lo que podemos ofrecer al Señor. No lo dejemos pasar esperando oportunidades mejores.
II. No cumplir el deber que el instante requería, dejarlo para después, equivale en muchas ocasiones a omitirlo. Aprovechad el tiempo presente...4, exhortaba San Pablo a los primeros cristianos. Y para esto necesitaremos someternos a un orden en nuestros quehaceres, y cumplirlo. Así, venciendo la pereza de un modo habitual, podremos ayudar a los demás y contribuiremos a "elevar el nivel de la sociedad entera y de la creación"5 mediante nuestro trabajo diario, cualquiera que este sea. Perezoso no es solo el que deja pasar el tiempo sin hacer nada, sino también el que realiza muchas cosas, pero rehúsa llevar a cabo su obligación concreta: escoge sus ocupaciones según el capricho del momento, las realiza sin energía, y la mínima dificultad es suficiente para hacerle cambiar de trabajo. El perezoso puede incluso ser amigo de los "comienzos", pero su incapacidad para un trabajo continuo y profundo le impide poner las "últimas piedras", acabar bien lo que ha comenzado. "El que es laborioso aprovecha el tiempo, que no solo es oro, ¡es gloria de Dios! Hace lo que debe y está en lo que hace, no por rutina, ni por ocupar las horas, sino como fruto de una reflexión atenta y ponderada"6.
Vivir el hodie et nunc, el hoy y ahora, nos llevará a estar atentos a lo que tenemos entre manos, con el convencimiento, muchas veces actualizado, de que se trata de una ofrenda para el Señor y que, por tanto, requiere plena dedicación, como si fuera la última obra que ofrecemos a Dios. Esta atención nos ayudará a terminar bien nuestros quehaceres, por pequeños que puedan parecer, pues se convertirán en algo grande en la presencia del Señor.
Estar pendientes del momento actual nos alejará de inútiles preocupaciones hacia enfermedades, desgracias o trabajos que aún no se han presentado y que quizá nunca lleguen a ser realidad. "Un sencillo razonamiento sobrenatural los haría desaparecer: puesto que estos peligros no son actuales y estos temores todavía no se han verificado, es obvio que no tienes la gracia de Dios necesaria para vencerlos y para aceptarlos. Si tus temores se verificasen, entonces no te faltará la gracia divina, y con ella y tu correspondencia tendrás la victoria y la paz.
"Es natural que ahora no tengas la gracia de Dios para vencer unos obstáculos y aceptar unas cruces que solo existen en tu imaginación. Es necesario basar la propia vida espiritual sobre un sereno y objetivo realismo"7. Vivir al día, de la mano de nuestro Padre Dios, viviendo en la filiación divina, nos libra de muchas ansiedades y nos permite aprovechar bien el tiempo. ¡Cuántas cosas funestas que temíamos no llegaron a ocurrir! Nuestro Padre Dios tiene más cuidado de sus hijos de lo que nosotros en ocasiones nos figuramos.
III. Aprovechar el tiempo significa vivir con plenitud el momento presente, como si no hubiera más oportunidades, sin recurrir al falso expediente de un pasado ya cumplido, sin pensar demasiado en un futuro incierto. Hoy y ahora, esta tarea concreta, es lo que podemos ofrecer al Señor y así enriquecer la propia vida sobrenatural. Es ahí donde podemos ejercitar las virtudes humanas (laboriosidad, orden, optimismo, cordialidad, espíritu de servicio...) y las sobrenaturales (fe, caridad, fortaleza...). "Ahora es el tiempo de misericordia, entonces será solo tiempo de justicia; por eso, ahora es nuestro momento, entonces será solo el momento de Dios"8.
El mismo Señor nos invitó a vivir con serenidad e intensidad cada jornada, eliminando preocupaciones inútiles por lo que ocurrió ayer y por lo que puede suceder mañana: No os agobiéis por el mañana, porque el mañana traerá su propio agobio; a cada día le basta su afán9. Es un consejo, y a la vez un consuelo, que nos lleva a no evadirnos del momento actual. Vivir el momento presente significa cargar con él decididamente para santificarlo, y eludir muchos pesos innecesarios y, ¡tantas veces!, mucho más duros de llevar. Esta sabiduría es propia de los hijos de Dios, que se saben en sus manos, y del sentido común de la experiencia cotidiana: El que está pendiente del viento no sembrará; el que se queda observando las nubes, no segará10.
Lo importante, lo que está en nuestras manos, es vivir con fe y con intensidad el momento presente: "Pórtate bien "ahora", sin acordarte del "ayer", que ya pasó, y sin preocuparte de "mañana", que no sabes si llegará para ti"11. Ni el deseo del Cielo, ni la meditación sobre las postrimerías pueden hacernos olvidar los quehaceres de aquí abajo. Se ha dicho de formas bien diversas que hemos de trabajar para esta tierra como si fuésemos a vivir siempre en ella, a la vez que trabajamos para la eternidad como si fuéramos a morir esta misma tarde. Es más, debemos tener siempre presente que es precisamente esta tarea del momento presente la que nos lleva al Cielo. Ahora es tiempo de edificar: no nos engañemos pensando que lo haremos en un futuro próximo.
1 Pablo VI, Homilía 1-I-1976. — 2 Ch. Lubich, Meditaciones, p. 61. — 3 Primera lectura. Año II. Eccl 3, 1-11. — 4 Cfr. Gal 6, 10. — 5 Conc. Vat. II, Const. Lumen gentium, 41. —6 San Josemaría Escrivá, Amigos de Dios, 81. —7 S. Canals, Ascética meditada, Rialp, 14ª ed., Madrid 1980, p. 134. — 8 Santo Tomás, Sobre el Credo, 7, en Escritos de catequesis, p. 86. — 9 Mt 6, 34. — 10 Eccl 11, 4. — 11 San Josemaría Escrivá, Camino, n. 253.
___________________________________________________________________________________________
† Santoral (si GoogleGroups corta el texto, lo encontrará en www.iesvs.org)
Padre Pío, Santo
"Un Pensamiento de Padre Pio para cada Día" se encuentra disponible en Español, Inglés, Francés, Italiano, Alemán y Portugués.
Si usted quiere recomendar otra persona que quiera también recibir "Un Pensamiento de Padre Pio para cada Día", envíe un mensaje a padrepio @padrepiogroup.org, informando el correo electrónico de la persona y escribe en el Sujeto "INCLUYE". Visite www.padrepiogroup.org o www.padrepiogroup.com.
http://www.gloria.tv/media/GhEHqUvRaGS
Película, PADRE PIO DE PIETRELCINA - En Español (audio) Pelicula Com
http://www.gloria.tv/media/g65DXEeqWwK
LA NOCHE DEL PROFETA-PELICULA DOCUMENTAL SOBRE EL PADRE …
http://www.gloria.tv/?media=35040
PADRE PIO-reza ten fe y no te preocupes
http://www.gloria.tv/?media=33393
50 AÑOS DE ESPINAS Y ROSAS-documental sobre el Padre Pio
http://www.gloria.tv/?media=34738
PADRE PIO-UN HOMBRE DE DIOS-documental sobre sus cartas
http://www.gloria.tv/?media=33347
Pelicula Documental - Padre Pio - Todos Santos 2004
http://www.gloria.tv/?media=95939
Irapuato: Padre Pío segunda parte … Padre Pío segunda parte
Exponen los restos del Padre Pio
http://www.gloria.tv/?media=5612
sanmiguelillo: Exponen los restos del Padre Pio … padre pio santo santos Giovanni Rotondo incorrupto incorruptible father italia …
CAMINO A LA SANTIDAD "PADRE PIO"
http://www.gloria.tv/?media=27198
Biografía
"Para atraernos,Nuestro Señor nos regala un multitud de gracias
que nosotros pensamos nos pueden llevar fácilmente al cielo. Mas
no sabemos, que para crecer, necesitamos del pan básico: la cruz,
la humillación, las pruebas y las negaciones". Padre Pío
San Andrés Huberto Fournet
Fundador de la Comunidad
de Hermanas de la Santa Cruz
(1752-1834)
SU VIDA
Este fue el muchacho que cuando era estudiante firmaba sus libros con esta frase: "Andrés, que nunca será ni religioso ni sacerdote". Y Dios le hizo la jugada de hacerlo sacerdote y fundador de una orden de religiosas. Nació cerca de Poitiers (Francia) en 1752.
En sus primeros años era rebelde y molestón y la única que medio lo podía soportar era su propia madre. Pero esta santa mujer se propuso hacer de esa fierecilla un buen pastor, que salvara otras almas que estuvieran en dificultades.
Su mamá era supremamente generosa con los pobres. Andrés la criticaba porque le parecía que ella daba demasiado, y le decía que a los pobres había que darles las sobras únicamente. Ella le dijo un día: "Mira, vas a la mesa, echas en una bandeja las mejores frutas, los panes más grandes y los traes y los regalas al pobre que está en la puerta pidiendo. Recuerda que lo que se dé al necesitado se le da a Nuestro Señor, y que para el Señor siempre se da lo mejor". En el momento el muchacho no entendió la lección, pero más tarde hará de este consejo de su madre una ley para toda su vida.
Los papás lo enviaron a un colegio a estudiar interno, pero Andrés era el promotor de todos los desórdenes. Parecía que tuviera cien pulgas debajo de la camisa. No era capaz de estarse quieto. Al fin el rector, como castigo, lo hizo encerrar en un cuarto oscuro. Pero el inquieto estudiante se fugó de allí y se fue para la casa. Cuando su padre ya le iba a dar por ello un tremendo castigo, la mamá intercedió por él y obtuvo que le perdonara el castigo con tal de que volviera al colegio y se portara bien. Así lo prometió y así lo cumplió. En adelante su conducta fue excelente.
Al empezar sus estudios de filosofía en Poitiers, perdió el poco fervor que tenía y se dedicó a una vida mundana y de continuos paseos y fiestas y bailes. Pero todo esto le dejaba un vacío inmenso en el alma y una insatisfacción completa y horrible.
Sin consultar a ninguno de su familia se entró de militar. Pero cuando quiso visitar a sus familiares, ninguno lo quiso aceptar. Y tuvo la mamá que ir al ejército y pagar una fuerte multa para que lo licenciaran y lo dejaran retirarse. Quiso buscar puesto como empleado público, pero tenía una letra tan enredada que en todas las oficinas donde pidió empleo fue rechazado.
Fue entonces cuando le recomendaron que se fuera a pasar unas semanas con un tío sacerdote, párroco, que tenía fama de santo. Y allí en compañía de este hombre de Dios, le llegó a Andrés el cambio total en su comportamiento y en su modo de pensar, y se dedicó a los estudios eclesiásticos, y a la oración y la meditación.
Fue ordenado sacerdote y enviado como ayudante de su tío el párroco.
Empezó a predicar y lo hacía con palabras muy elegantes y rebuscadas. Un día al empezar el sermón se le olvidó todo y tuvo que suspender su sermón. Su tío, el anciano párroco, le dijo: "Es que lo que buscas es lucirte y aparecer bien ante los demás, y eso no le gusta a Dios. Debes predicar con más sencillez". Cambió entonces de método y en adelante la gente comentaba: "Antes el padrecito aparecía como muy sabio, pero nadie le entendía nada. Ahora habla como nosotros, y su predicación nos vuelve mejores".
Cuando ya lo nombraron párroco, Andrés se dedicó a vivir muy elegantemente con lujosas comodidades en su casa cural. Más le interesaba aparecer como un señor muy importante que como un santo sacerdote. Su madre seguía rezando mucho por él. Y un día que había preparado un gran almuerzo para los más ricos de la parroquia llegó un pordiosero a pedirle limosna y entró hasta el comedor. El Padre le dijo que no tenía nada para darle, y el otro observando esas mesas tan bien servidas le dijo: "¿Y todo esto qué es?". Y mirándolo fijamente le dijo: "Padre Andrés, usted vive más como un rico que como un pobre, como lo manda Cristo". Esta frase le impresionó inmensamente al joven párroco. Esa noche se fue a la iglesia y le pidió perdón a Nuestro Señor y desde el día siguiente quitó todos los lujos de su casa parroquial, y se dedicó por completo a ayudar a los pobres. En adelante en vez de invitar a los ricos se iba a visitar a los más abandonados. Desde que dejó su vida de lujos y de comilonas y se dedicó a gastar todo lo que recibía a favor de los pobres, la santidad de Andrés empezó a crecer notablemente.
En 1789 estalló la terrible Revolución Francesa que asesinó a miles de católicos y persiguió sin compasión a todos los sacerdotes. El Padre Andrés tuvo que esconderse y los guardias de la revolución lo buscaban por todas partes. Un día cuando estaba escondido en un armario en una familia, al oír que los perseguidores amenazaban a los demás de la casa, salió y se les presentó a los militares, y estos quedaron tan impresionados ante su venerable presencia, que se fueron y no se lo llevaron preso.
El Padre Andrés se disfrazó de labrador y se fue a vivir en la finca de una señora muy católica. Pero un día llegaron allá los enviados del gobierno en busca de él para llevárselo y matarlo. La señora y Andrés estaban charlando junto a la chimenea cuando de repente llegaron los gendarmes preguntando por el sacerdote. La dama sin más ni más le dio una cachetada al padre diciéndole: "Váyase inmediatamente a hacer sus oficios y deje de estar por aquí sin hacer nada". Los militares creyeron que era un servicial de la casa y no lo siguieron, y así él pudo salir huyendo. Después decía por burla: "Fue lo mejor que usted podía hacer. Si no, me habrían descubierto".
Después tuvo que salir huyendo hacia España y allá estuvo cinco años. Cuando suavizó la persecución, volvió a su querida parroquia de Maillé y se dedicó a reavivar el fervor de sus parroquianos predicándoles misiones y dedicando muchas horas a confesar. Todos lo querían.
Tuvo la suerte de encontrar una mujer con grandes cualidades para la vida religiosa, Santa Isabel Bichier, y con ella fundó la Comunidad de Hermanas de la Santa Cruz, que se llaman también, hermanas de San Andrés. Él fue hasta su muerte el director espiritual de esa comunidad. Un día en que las religiosas no tenían casi harina para hacer pan para sus muchos niños pobres, el santo le dio la bendición a un poco de harina, y con ella pudieron hacer pan para todos.
Muchos laicos y sacerdotes lo buscaban para que les diera dirección espiritual porque tenía el don de saber aconsejar muy bien.
El 13 de mayo de 1834 pasó a gozar de la paz del Señor
Para nosotros la vida de San Andrés Fournet es un ejemplo de cómo aunque en nuestros primeros años no hayamos sido muy fervorosos, si tenemos buena voluntad y deseo de tener contento a Dios, podremos ir avanzando notablemente hacia la santidad.
___________________________________________________________________________________________
Fuente: Archidiócesis de Madrid
Zacarías e Isabel, Santos Padres de Juan el Bautista, Septiembre 23
Padres de Juan el Bautista Martirologio Romano: Conmemoración de los santos Zacarías e Isabel, padres de san Juan Bautista, Precursor del Señor. Isabel, al recibir a su pariente María en su casa, llena de Espíritu Santo saludó a la Madre del Señor como bendita entre todas las mujeres, y Zacarías, sacerdote lleno de espíritu profético, ante el hijo nacido alabó a Dios redentor y predicó la próxima aparición de Cristo, Sol de Oriente, que procede de lo Alto. |
___________________________________________________________________________________________
Tecla, Santa | |||
Biografía 23 de septiembre. | |||
| |||
|
___________________________________________________________________________________________
Lino, San | |||
Papa y mártir del siglo I, 23 de septiembre | |||
| |||
|
___________________________________________________________________________________________
Sosso (Sosio) de Misena, Santo Diacono y Mártir, Septiembre 23
Diácono y Mártir Martirologio Romano: En Misena de Campania, en Italia, san Sosso (antes Sosio), diácono y mártir, quien, al decir del papa san Símaco, deseando proteger de la muerte a su obispo, consiguió también él el martirio con igual precio y gloria (c. 305). |
___________________________________________________________________________________________
Fuente: Vatican.va
Emilia Tavernier Gamelin, Beata Viuda y Fundadora, Septiembre 23
Fundadora de la Congregación de Martirologio Romano:En Montreal, en la provincia de Quebec, en Canadá, beata María Emilia Tavernier, religiosa, que, al perder el marido y los hijos, se entregó a cuidar a los necesitados, fundando la Congregación de las Hermanas de la Providencia, en favor de los huérfanos, ancianos y débiles mentales (1851). |
___________________________________________________________________________________________
Bernardina María Jablonska, Beata Cofundadora, Septiembre 23
Cofundadora de la Congregación de En Cracovia, en Polonia, beata Bernardina Jablonska, virgen, cofundadora de la Congregación de Hermanas Servidoras de los Pobres, siempre solícita para con los necesitados y enfermos (1940). |
___________________________________________________________________________________________
Elena Duglioli Dall'Olio, Beata Viuda, Septiembre 23
Esta viuda boloñesa no ha tenido, por desgracia, biógrafos muy objetivos: en un intento de ensalsar la figura, inventaron detalles cada cual más fantasioso. |
___________________________________________________________________________________________
Fuentes: IESVS.org; EWTN.com; hablarcondios.org, Catholic.net, misalpalm.com
Mensajes anteriores en: http://iesvs-org.blogspot.com/
Si NO desea el evangelio, santoral y meditación diaria y sólo artículos interesantes censurados por la prensa (la mayoría), unos 4 por semana escriba a: ave-maria-purisima+subscribe@googlegroups.com (responder el mensaje de confirmación).
Para de-suscribirse escribir desde su casilla de email a:
REEMPLACEporNOMBREdelGRUPO+unsubscribe@googlegroups.com
Si no se desuscribe es porque recibe el mensaje en su otro email que le reenvía al actual: debe escribir desde ese otro email.